El Gobierno concederá permisos de empleo de dos años a jóvenes inmigrantes que trabajaron en el campo durante la pandemia

Los jóvenes extranjeros de entre 18 y 21 años que se incorporaron al trabajo en el campo desde el inicio del estado de alarma, ante la falta de mano de obra necesaria para recolectar la cosecha, obtendrán una autorización de residencia y trabajo de dos años, renovables a otros dos, según una nueva instrucción publicada este miércoles por la Secretaría de Estado de Migraciones.

La mayoría de beneficiados son jóvenes inmigrantes que llegaron solos a España siendo menores y, aunque vivían de forma regular en el país, no tenían acceso al mercado laboral. En plena pandemia, el Gobierno sí permitió su acceso al trabajo para recoger la fruta y verdura de los campos españoles, debido a la falta de mano denunciada entonces por los agricultores.

La instrucción “aporta seguridad jurídica a todos estos jóvenes que con su labor están contribuyendo al sostenimiento de un sector esencial en un momento de dificultad para nuestro país”, han defendido desde la Secretaría de Estado de Migraciones en un comunicado.

En el mes de abril, el Ministerio de Agricultura aprobó de urgencia un real decreto para impulsar la contratación temporal de trabajadores, que permitía el acceso al campo a españoles en situación de desempleo y a trabajadores migrantes en situación regular cuyo permiso de trabajo fuera a concluir antes del pasado 30 junio, y a jóvenes nacionales de terceros países entre los 18 y los 21 años que se encuentren en situación regular.

Para estos últimos, su incorporación al campo suponía una primera oportunidad laboral. Una vez vencida la prórroga del Real Decreto por el que se flexibilizaban las condiciones para el acceso al empleo en el sector agrario, Migraciones facilitará que los jóvenes extranjeros beneficiados mantengan sus permisos de residencia y trabajo por un plazo de dos años renovables a otros dos.

De esta manera, estos trabajadores podrán presentar su solicitud entre el 1 y el 30 de octubre de 2020. Por su parte, los jóvenes cuyo contrato estuviese en vigor a fecha 30 de septiembre podrán prorrogar su derecho a trabajar en el campo a través de la presentación de la solicitud en los plazos establecidos por Migraciones. Asimismo, los jóvenes contratados en el sector agrario durante la pandemia que hayan cumplido los 22 años durante sus meses de trabajo también podrán prorrogar sus permisos.

Como adelantó El País en mayo, la Secretaría de Estado de Migraciones ya había mostrado su intención de prorrogar dos años la autorización de residencia y trabajo de los jóvenes extranjeros beneficiados, aunque aún no había detallado los requisitos exigidos. La nueva instrucción establece que estas personas deberán acreditar haber sido contratados en el sector agrario “para una actividad continuada” sin que “hayan desistido de la misma”. Dicho criterio se demostrará en base a una declaración responsable de la institución u organización que haya acompañado al empleado durante este tiempo.

En caso de no poder contar con esta declaración, Migraciones facilita otras vías para que estos jóvenes puedan prorrogar sus permisos a través de la presentación de contratos de trabajo en el campo con una duración mínima de dos meses. Los empleados que solo hayan realizado una actividad continuada durante un mes, pero que su interrupción no haya sido por voluntad propia, también podrán mantener su autorización siempre que demuestren que han continuado en busca de empleo en el sector agrario.

En caso de no cumplir estas exigencias, el Ministerio de Inclusión deja una puerta abierta. “Se analizará individualmente la solicitud teniendo en cuenta informe de esfuerzo de integración u otros informes elaborados por el empleador u organización donde se recomiende, ante el compromiso mostrado en la realización de la actividad para la que ha sido contratado, la concesión de dicha autorización”, apunta el documento, al que ha tenido acceso elDiario.es.

Otro de los requisitos para obtener la prórroga de sus permisos es carecer de antecedentes penales, pero Migraciones también se muestra flexible en este extremo, si los jóvenes temporeros fueran condenados por la comisión de un delito y hayan cumplido la condena, los que hubieran sido indultados o se hallasen en situación de remisión condicional de la pena o de suspensión de la pena.

Distintas organizaciones sociales, como la Asociación Marroquí para la Integración de Inmigrantes y Andalucía Acoge, se habían mostrado inquietas en los últimos días ante la proximidad del vencimiento de la prórroga. “Estas medidas habían permitido que se abra una vía de acceso al mercado laboral, por lo que es tan necesaria la ampliación de la prórroga. Contar con un empleo es uno de los requisitos además para que puedan renovar el permiso de residencia, lo que es elemental para no caer en situación administrativa de irregularidad”, pedían desde la primera organización.