La última propaganda agraria

Cobijados bajo eso de “no dejes que la realidad te estropee un buen titular”, en el último Consejo de Gobierno, antes de las elecciones, se aprobó un Decreto destinado a financiar préstamos a titulares de explotaciones agrícolas (fruta de hueso, olivar, viña y cereal de secano) y ganaderas que hubieran sufrido vacios sanitarios.

Intentar remediar uno de los principales problemas que sufre el sector agrario es loable, fomentar la ayuda a la financiación es encomiable y facilitar la obtención de circulante es también laudable; pero lo que no entiendo bien es porque se ha esperado justo hasta el momento previo a la cita electoral para su aprobación (la publicación en el DOE fue el 26 de Mayo), cuando las dificultades financieras son permanentes y el presupuesto está publicado desde el día 31 de diciembre de 2014.

No son muchas las respuestas a esta duda, y alguna será cierta: procrastinación, pereza, despreocupación, dejadez, convencimiento absoluto de la victoria electoral, o simplemente el uso del Consejo de Gobierno como una valla electoral. Y andan en este juego nada menos que dos millones de euros, que es la cantidad que presupuesta esta Norma; aunque en la nota de prensa se hablara de tres millones, bueno 2.999.999, 99€ que así de finos andamos.

Los plazos para solicitarlos terminan el 27 de Julio, a un paso de Agosto, que para estas cosas del “papeleo” no es especialmente recomendable; por lo que entre comunicaciones, rectificaciones y firmas de préstamos nos iremos a Septiembre, ya fuera de los ciclos de la mayoría de los cultivos afectados. Y el campo necesita, con urgencia, soluciones con ritmos agrarios, no a ritmos políticos.