Dos buitres negros incapacitados para vivir en libertad, a punto de criar en cautividad en Villafranca
La asociación Amus (Acción por el Mundo Salvaje) ha conseguido emparejar a dos ejemplares de buitres negro en el hospital de fauna silvestre de Villafranca de los Barros, donde ahora se custodia el huevo que podría ser el primer paso para la reproducción en cautividad de esta especie calificada como vulnerable en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas.
Los controles por ovoscopia apuntan que el huevo está fecundado, según indica Amus en una nota de prensa.
Los ejemplares emparejados son un buitre negro al que le falta un ala por haber chocado en su día contra una línea eléctrica, junto a otro ejemplar también con grave lesión, ambos inviables en la naturaleza.
Amus destaca, por las dificultades de los propios individuos al estar impedidos, su poder de adaptación y de esperanza en animales que nunca podrán ser devueltos a la naturaleza.
En estos momentos el huevo ha sido retirado de la pareja y gestionado artificialmente con el empleo de una de las incubadoras del departamento de cría.
La idea es asegurar el nacimiento del pollo y una vez se completen los primeros días de cuidados, será devuelto a sus padres para que completen la crianza.
Varias actividades
Esta acción se complementa con otras que lleva a cabo Amus en diferentes proyectos nacionales y europeos en beneficio de aves necrófagas desde hace años.
Sin embargo, el buitre negro ha sido una de las grandes dianas en su esfuerzo, desde los ejemplares rehabilitados en el propio hospital hasta los proyectos internacionales de reintroducción en los que se colabora con diversas regiones europeas, pasando por la red de puntos de alimentación suplementaria.
También destacan las acciones de custodia y gestión del territorio en áreas favorables para que la especie recolonice antiguos espacios de distribución y la lucha contra el veneno a través del grupo de trabajo “Amenazas fauna”.
Extremadura, recuerda esta asociación conservacionista, es el territorio referente en el mundo por poseer las mayores poblaciones de buitre negro -más de 900 parejas-, que se asientan en el Parque Nacional de Monfragüe, el ZEC de la Sierra de San Pedro en Cáceres o el Parque Natural del Tajo Internacional y la Sierra de Gata, donde están “las más boyantes colonias de una de las aves mayores del planeta con casi tres metros de envergadura”.
Para la asociación este hecho supone una “gran noticia y un revulsivo” para seguir testando diferentes maniobras que permitan la reproducción de especies amenazadas.
0