Los Presupuestos de Olivenza, anulados por un tribunal al carecer de interventor
Un juzgado de lo contencioso administrativo de Badajoz acaba de anular los Presupuestos 2015 de Olivenza, por haber sido intervenidos por una empleada municipal con contrato laboral, en vez de un funcionario de carrera con habilitación para el cargo.
“Un ejemplo más del daño que han hecho y de su gestión”, señala el actual alcalde socialista de la localidad Manuel González Andrade, partido político que fue el que denunció en los tribunales la aprobación de estas cuentas, que se aprobaron en diciembre de 2014 por el anterior equipo de gobierno del PP en una junta de gobierno, al haber sido rechazadas por la oposición en un pleno extraordinario.
Desde 2010 Olivenza venía funcionando con el último presupuesto que hizo el PSOE, que perdió las elecciones al año siguiente; 2012, 2013 y 2014 transcurrieron con el mismo, hasta que al final de ese último año el PP liderado por el alcalde Bernardino Píriz redactó unas cuentas nuevas.
Los informes de intervención del proyecto económico los hizo una trabajadora municipal, que por no ser funcionaria estaba incapacitada para otorgar la legalidad del conjunto, como ha decretado el juzgado de lo contencioso administrativo número 2 de Badajoz el pasado 18 de noviembre.
Adaptar los antiguos
El antiguo portavoz socialista José Rodríguez recurrió los presupuestos y ahora el alcalde del PSOE Manuel González explica que tendrán que volver a los de 2010, ajustándolos a las necesidades actuales, lo que no va ser fácil y obliga a trastornos de procedimiento burocrático, aunque con la suerte de que están en puertas de unas cuentas nuevas para 2016.
Ya no hay problemas de intervención de las cuentas, pues el antiguo funcionario titular, que se había trasladado a Badajoz en comisión de servicio, ha vuelto a su puesto.
Un concejal de IU que quiere consultar documentos y el alcalde del PP le manda la Guardia Civil, las denuncias socialistas por irregularidades electorales, la no devolución de móviles y tabletas electrónicas, o la acumulación de deudas por sentencias y contratos impagadas, etc., mantienen a Olivenza constantemente en primeros planos, con el añadido de la escisión que se produjo dentro del PSOE cuando el antiguo alcalde no encajó la derrota en las primarias frente al alcalde actual y los concejales dimitieron en bloque.
