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La UE se acerca a sus vecinos del Este mientras advierte a Putin de “graves consecuencias” si invade Ucrania

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, el 15 de diciembre en la cumbre de la Asociación Oriental en Bruselas.

Andrés Gil

Corresponsal en Bruselas —

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Las relaciones con Rusia atraviesan uno de los peores momentos desde la Guerra Fría. EEUU, la OTAN y la UE señalan al Kremlin, al que acusan de campañas desestabilizadoras, de ciberataques, de “agresiones híbridas” a través de Bielorrusia o, directamente, de preparar un ataque contra Ucrania.

En este contexto, el mismo día que la hija de Alexei Navalni ha recogido el premio Sajarov de los Derechos Humanos del Parlamento Europeo en Estrasburgo, la UE ha celebrado este miércoles una cumbre de la Asociación Oriental, con Armenia, Azerbaiyán, Georgia, la República de Moldavia y Ucrania.

La silla de Alexander Lukashenko, el presidente de Bielorrusia, ha quedado vacía. Con Minsk las relaciones atraviesan son muy tensas, desde que la UE tachó las últimas elecciones fraudulentas y se sucedieron sanciones, persecución de disidentes, el secuestro de un avión de Ryanair y el uso de migrantes y refugiados como arma de presión política en la frontera con Polonia.

El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha afirmado en la sala: “Quiero enviar un mensaje claro de nuestro compromiso con la Asociación Oriental. No solo somos vecinos, somos verdaderos socios. Esto incluye cooperación política, recuperación socioeconómica y, por supuesto, reformas democráticas”.

Michel ha explicado que desde la última cumbre, en Bruselas, en 2017, la Asociación Oriental ha conseguido: “Acuerdos bilaterales, eliminación de visados; el comercio entre la UE y la región casi se ha duplicado, convirtiéndose en el décimo socio comercial más grande de la UE con 65.000 millones de euros”.

El presidente del Consejo Europeo se ha dirigido directamente a Lukashenko: “Estamos dispuestos a desempeñar un papel activo para ayudar a prevenir y resolver conflictos. Echamos de menos a un país que no está presente hoy. Hay una silla vacía para Bielorrusia como lugar simbólico. Estamos unidos en nuestro apoyo al pueblo bielorruso y su deseo de un futuro democrático”.

En este sentido, la declaración aprobada tras la cumbre afirma: “La UE lamenta la decisión de las autoridades bielorrusas de suspender su participación en la Asociación Oriental y espera reanudar la cooperación tan pronto como se den las condiciones necesarias para una transición democrática pacífica. Mientras tanto, la UE sigue apoyando a los ciudadanos de Bielorrusia, la sociedad civil y los medios de comunicación independientes. El plan global de apoyo económico para una Bielorrusia democrática, de hasta 3.000 millones de euros, refleja el compromiso de la UE de apoyar la elección democrática del pueblo bielorruso. Reiterando declaraciones anteriores, la UE condena la instrumentalización de migrantes y refugiados por parte de las autoridades bielorrusas y todos los incidentes de instrumentalización de migrantes con fines políticos”.

Michel también ha hablado de inversiones en una región formada por ex repúblicas soviéticas: “Nuestra nueva agenda se sustenta en un ambicioso plan económico y de inversiones para movilizar más de 2.000 millones de euros. Estas inversiones tendrán un impacto real en toda la sociedad”. Y, a cambio, Michel habla de asuntos políticos pendientes: “Nuestros valores fundamentales seguirán siendo los pilares de nuestra futura asociación: derechos humanos, Estado de derecho, gobernanza y rendición de cuentas democrática, igualdad de género y apoyo a la juventud. El apoyo de la UE seguirá estando condicionado a este respecto”.

Según la declaración aprobada, esa inversión regional de 2.300 millones de euros tiene “el potencial de movilizar hasta 17.000 millones de euros en inversiones públicas y privadas para la región”.

“Rusia está eligiendo ser agresiva con sus vecinos”

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha afirmado este miércoles en el pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo: “La situación en nuestra frontera con Bielorrusia es un intento deliberado de desestabilizar la seguridad de nuestras democracias y las de nuestros vecinos”.

“Todos hemos visto la acumulación masiva de militares de Rusia a lo largo de la frontera oriental de Ucrania, y también el intento de desestabilizar Ucrania desde dentro”, ha afirmado: “Quiero reafirmar nuestro compromiso inquebrantable con la soberanía y la integridad territorial de Ucrania, así como el derecho de cualquier estado soberano a determinar su propio futuro”.

“También vemos el flagrante intento de intimidar al Gobierno reformista de Moldavia exprimiéndoles el suministro de gas en un momento de altos precios de la energía”, ha proseguido la jefa del Ejecutivo comunitario: “Debemos proteger nuestras sociedades y nuestras democracias de este tipo de juego geopolítico. Por supuesto, queremos buenas relaciones con Rusia. Pero depende del comportamiento de Rusia. En este momento, Rusia está eligiendo una postura agresiva frente a sus vecinos. Y como la Unión Europea y sus socios del G7 han dejado muy claro, nuevos actos agresivos contra Ucrania tendrán costes masivos para Rusia”.

Kiev pide ayuda ante el ruido de tanques en su frontera. Mientras, Moscú alega que sus fronteras ya no son seguras, en tanto que las ex repúblicas soviéticas se acercan a la OTAN y, sostiene, la presencia occidental está detrás de movimientos antirrusos en Ucrania –donde el Kremlin tiene abierto el conflicto por Donbás (la cuenca del Donets), además de la anexión de Crimea hace diez años (2011), entre otros–, o Bielorrusia.

En su polémica visita a Moscú de febrero, Josep Borrell, el jefe de la diplomacia europea, protestó por la falta de derechos civiles y humanos en Rusia, y se llevó los desplantes de Sergéi Lavrov, además de la expulsión de tres diplomáticos por parte de Moscú. La tensión creció y llegó la aprobación de sanciones en EEUU y la UE contra los responsables directos del encarcelamiento del opositor Navalni.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha mantenido este miércoles una reunión bilateral con el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenski. Según fuentes de Moncloa, “Sánchez ha reiterado a Zelenski el compromiso constante, coherente y consistente de España con el principio de soberanìa e integridad territorial de Ucrania”.

En junio, los líderes de la UE encomendaron al Alto Representante, Josep Borrell, la tarea de proponer opciones. “Desde entonces, hemos estado trabajando en esto en estrecha cooperación con los Estados Unidos y otros socios”, ha dicho Von der Leyen: “Estamos preparados. Existe un conjunto completo de sanciones económicas, dirigidas a los sectores financiero y energético. Nuestra respuesta a cualquier agresión llevará consigo un aumento de las sanciones existentes. Y, por supuesto, estamos dispuestos a tomar medidas adicionales sin precedentes con graves consecuencias para Rusia. Pero, sobre todo, pido a Rusia que se relaje, siga los canales diplomáticos y cumpla sus compromisos internacionales. Los conflictos deben resolverse pacíficamente”.

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