Logroño Andando pide priorizar el uso peatonal y ciclista en el Puente de Piedra

Logroño Andando ha reclamado este lunes priorizar el uso peatonal y ciclista en el Puente de Piedra una vez se reabra esta infraestructura al tráfico en marzo. Este colectivo destaca que el principal efecto del cierre del puente para sus obras de mejora ha sido “la entrada de mucho más tráfico a motor en la calle Sagasta, y a mayor velocidad que en la situación anterior”.

“La intervención de urbanismo táctico en la C/ Sagasta ha sido un fracaso: no se ha dado oportunidad real al uso de la calzada por los peatones, porque no ha habido ninguna restricción al tráfico, ni elementos físicos que fuercen la reducción real de la velocidad de los coches y motos. Esta opinión la comparte parte del vecindario de C/ Sagasta, que nos refieren exceso de velocidad y tráfico sin controlar en esta calle (teóricamente limitada a 20 km/h)”, explican desde Logroño Andando.

A su juicio, “la reapertura del Puente de Piedra supone una oportunidad para reconsiderar las conexiones con los barrios del Campillo, San Antonio y Norte y con Oyón, priorizando los trayectos en autobús, en bicicleta y a pie”.

“Rechazamos el criterio previsto de mantener la vía más directa al coche, reabriendo en las mismas condiciones el Puente de Hierro y el de Piedra, como parece estar previsto. Esto supondría perder una oportunidad para la reducción del tráfico a motor, y así poder mejorar la accesibilidad peatonal, ciclista y de transporte público desde el Campillo y San Antonio hacia el centro, así como para reducir la cantidad de tráfico en C/ Sagasta y El Espolón”, añaden los integrantes de este colectivo.

E insisten en que “reintroducir tráfico a motor en el Casco Antiguo, que constituye un punto de interés para la ciudad al completo por su actividad comercial, de hostelería, de ocio y de turismo, lo convierte en un entorno desagradable y peligroso (por emisión de ruidos, gases y posibles atropellos), y es un retroceso que perjudica a uno de los principales centros de atracción de nuestra ciudad , y por tanto a todos sus habitantes”.

“Esto también es contrario con los objetivos declarados del Ayuntamiento de Logroño dentro de la candidatura a Capital Verde Europea, que entre otros objetivos valora la evolución de los indicadores de movilidad sostenible, es decir, la reducción de uso del coche y moto privados”, añaden.

Proponen que una manera de “preservar el disfrute universal del Casco Antiguo” sería reservar el Puente de Hierro al uso peatonal y ciclista, y permitir únicamente el paso de vehículos a motor de residentes, de carga/descarga y de emergencias (policía, ambulancias y bomberos).

También, afirman, “puede limitarse el Puente de Piedra a un solo sentido para vehículos a motor y autobús, permitiendo los dos sentidos para recorridos peatonales y ciclistas. Si se reservara únicamente al paso de autobús, taxi y vehículos de emergencia, se podría hacer más rápido y atractivo el servicio de autobús urbano, al hacerlo independiente de las condiciones del tráfico”.

“Estas acciones generarían recorridos peatonales, ciclistas y de transporte público más directos, cómodos, atractivos y seguros, además de preservar el Casco Antiguo como entorno seguro y libre de ruidos, y sin perjudicar al comercio y hostelería. Los tiempos de trayecto a pie desde el Campillo y San Antonio hasta el Centro urbano son asequibles (se puede llegar al Espolón en 15 minutos), y en bicicleta son especialmente atractivos (casi toda la ciudad está a menos de 20 minutos)”, subrayan.

Y añaden que “además, esto tampoco incrementa significativamente la duración de los trayectos en coche, con diferencias de aproximadamente 3-5 minutos empleando los puentes de la A-13 o el Cuarto Puente en lugar del Puente de Piedra o Hierro”.