¿Qué comer en Semana Santa en Chueca y Salesas?

Como no podía ser de otra manera, la Semana Santa nos trae nuevamente a la mesa interesantes propuestas gastronómicas para todos los paladares, desde contundentes guisos de vigilia (en los que el bacalao es el rey) hasta deliciosos postres con los que poner el broche de oro a la sobremesa de estos días de recogimiento espiritual.

En la zona de Chueca y Salesas son muchos los lugares donde poder degustar todos estos manjares típicos. Mientras unos ofrecen las recetas tradicionales, otros realizan una apuesta más contemporánea, aportando tintes de vanguardia a la comida de siempre. En este artículo os ofrecemos un pequeño recorrido por las diferentes alternativas que podemos encontrar.

Bacalao y potaje para templar el estómago

Tal vez uno de los platos más característicos de Semana Santa es el potaje de vigilia, una variedad de potaje cuyos orígenes se remontan a la prohibición religiosa de comer carne los viernes de cuaresma y que se realiza con bacalao en salazón, alimento que también se deja caer en estas fechas por buñuelos, croquetas, tortillitas...

La receta varía dependiendo los ingredientes finales que lleve el potaje, pero lo más frecuente es desalar el bacalao y poner los garbanzos en remojo un día antes. La legumbre se pone a cocer y, a continuación, se añaden espinacas y el bacalao desalado.

Como Juan Palomo: «yo me lo guiso, yo me lo como»

Si lo que te gusta es el producto hecho en casa, en el barrio puedes encontrar numerosas tiendas donde conseguir materias primas de calidad para elaborar sus propias recetas. Uno de esos palacios gourmet es La Casa del Bacalao (Mercado de San Antón 1ª planta, local 12) , un negocio familiar con más de treinta años de experiencia que abrió sus puertas en el Mercado de San Antón en 2011 y que no sólo tiene la más amplia oferta de bacalao de todo Madrid, sino que en esta época del año cuentan con un corte especial para potajes solo disponible en la tienda del Mercado de San Antón.

Otra alternativa es Bacalao Barceló (Mercado Barceló - 2ª planta, puesto 328), una tienda totalmente especializada en esta materia prima donde también podrás encontrarlo durante todo el año. También se puede conseguir en el supermercado UDACO de la calle Libertad 39, un ultramarinos de los de toda la vida.

Las torrijas, esa dulce tentación

Con la llegada de la Semana Santa, los escaparates de las pastelerías, panaderías y hornos del barrio se muestran de lo más apetecibles. Pestiños, huevos de chocolate cada vez más originales y monas de Pascua intentan competir año tras año, con escaso éxito, con el dulce por excelencia de estas fiestas y todo un emblema en Madrid: las torrijas.

El Horno San Onofre 

(que además participa en la II Ruta de la Torrija de Madrid),  La Duquesita (Fernando VI, 2), Pastelerías Mallorca, Riofrio (C/ Génova, 28), Rocafria (C/ Barquillo, 20) y Viena Capellanes 

son algunos de los clásicos del barrio para hacerse con los dulces tradicionales de la Semana Santa.

Fiel a su cocina mediterránea con tintes asiáticos, en Oribu Gastrobar (C/ Barquillo, 10) nos proponen, de cara a la Semana Santa, una reinvención de la receta tradicional de lo más fresca y sugerente: torrija de sobao pasiego, lemongrass y helado de yogur búlgaro, que le ha valido su inclusión en el ranking de Telva ‘10 torrijas diferentes por 10 chefs’.

Siguiendo esa misma estela vanguardista, nos encontramos las propuestas de Mama Framboise (C/ Fernando VI, 23), Pomme Sucre (C/ Barquillo, 49), Cosmen & Keiless (Plaza de las Salesas, 8) o en La Cocina de San Antón (C/ Augusto Figueroa, 24).