Aygo X Cross: el último modelo de Toyota es un mini SUV que cuesta menos de 13.000 euros
Si hubiera que elegir una sola de las cualidades que distinguen a Toyota como fabricante, esa sería seguramente la determinación con que lleva hasta sus últimas consecuencias las decisiones que adopta. La de fabricar híbridos cuando nadie se planteaba ni remotamente hacerlo es una de ellas; demorar su primer eléctrico puro hasta que el mercado no estaba a su parecer lo bastante maduro sería otra, y lo mismo cabría decir de su insistencia en permanecer en el segmento A, el de los coches más pequeños y urbanitas, cuando la mayoría de las marcas -Citroën, Peugeot, Opel, Ford…- hace ya tiempo que desertaron por falta de rentabilidad.
El resultado de esta última apuesta de Toyota se llama Aygo X Cross, un vehículo de 3,7 metros de longitud que emplea la plataforma del Yaris, perteneciente este al segmento B, y como consecuencia de ello se beneficia de muchas de sus virtudes, entre ellas la dotación de ayudas a la conducción. Esta evolución del Aygo que se vende desde 2005 es, además, la primera desarrollada íntegramente en Europa y que se produce de manera independiente por parte de Toyota, una vez disuelta la joint venture que la unía hasta ahora con el grupo PSA (ahora Stellantis) para fabricar tanto este modelo como el Citroën C1 y el Peugeot 108.
La única manera que tenía la firma japonesa de sacar adelante el proyecto en solitario era preparar un vehículo que aprovechara las sinergias con el Yaris pero al mismo tiempo, para ser rentable y poder venderse a un precio atractivo, prescindiera de la hibridación y, por supuesto, de la electrificación total a que se han sometido, por ejemplo, supervivientes de la categoría como el Fiat 500e o el Smart fortwo.
En consecuencia, Toyota ofrece un coche urbano desenfadado y sumamente pintón -hemos podido observar la curiosidad que despierta durante la presentación celebrada en Barcelona-, con la estética SUV que impone la moda y a un precio realmente apetecible en estos tiempos de alta inflación. En su acabado más básico (Play), cuesta 13.600 euros al contado y 12.350 euros financiado con Toyota Easy, de modo que pocas opciones hay ahora mismo más asequibles en el mercado español.
La gama se completa con la Trendy Edition, llamada a acaparar el mayor porcentaje de ventas y disponible desde 14.600 euros, y la Limited Edition, equipada con todo lo deseable en cuestión de seguridad y conectividad, que sale por 17.000 euros; ambos precios se reducen en 1.250 euros acogiéndose a la financiación de la marca. El Trendy puede incorporar los paquetes Smart y Connect, y el Limited, el Pack Sky, que consiste básicamente en un techo de lona corredizo y de accionamiento eléctrico.
De mover el Aygo X Cross se encarga un clásico de la casa, el motor tricilíndrico de gasolina 1.0 de 72 caballos, afinado para cumplir las últimas normas anticontaminación y para mejorar el nivel de ruido exterior y la eficiencia. El consumo medio homologado se sitúa ahora entre los 4,7 y los 5,2 litros/100 km, en función del equipamiento que se escoja y del tipo de cambio, que puede ser manual de cinco velocidades o automático de tipo CVT. Este último ha sido aligerado y reducido en tamaño -respecto a la transmisión a la que remplaza- con el mismo fin de rebajar emisiones de CO2 (quedan entre 107 y 117 g/km) y consumo, y recibe además modificaciones en la centralita y un intercambiador de temperatura.
Ideal para el tráfico urbano
El mini de Toyota luce algunos atributos muy interesantes en un coche de vocación eminentemente urbana. Por ejemplo, una posición de conducción elevada 55 milímetros, para dominar mejor lo que sucede en la vía, un pilar delantero más estrecho y atrasado un 10% en relación al Aygo -también por mor de la visibilidad- y una carrocería más ligera (el modelo supera por poco los 1.000 kilos) y que reduce el balanceo un 26%, además de un radio de giro de solo 4,7 m, ideal para callejear.
El maletero, por su parte, crece un 35% y alcanza los 269 litros, suficientes para acomodar la compra semanal o un par de maletas de tamaño trolley. La única lástima es que, al carecer de un tirador o de un asidero, el pequeño portón -de vidrio, como en generaciones anteriores- está condenado a llenarse de marcas de dedos.
El equipamiento de seguridad que puede incorporar el Aygo X Cross comprende el control de velocidad adaptativo, reconocimiento de señales de tráfico, sistema precolisión con detector de peatones y ciclistas, control inteligente de luces de carretera y asistente tanto para advertir del cambio involuntario de carril como para mantener el vehículo dentro de él.
Con el recién llegado a su gama SUV, Toyota aspira a copar en España un 10% de las ventas correspondientes a los segmentos A (Aygo X Cross), B (Yaris) y B-SUV, donde se enclava el recientemente presentado Yaris Cross (puedes leer el artículo aquí). Del mismo modo, tiene la intención de concentrar el 10% de todas las entregas de SUV en nuestro país, gracias a los modelos C-HR, RAV4, Highlander, Yaris Cross y Aygo X Cross.
El benjamín de la familia acumula 550 pedidos desde que se abrió la preventa en enero, y los primeros compradores recibirán sus unidades en el mes de mayo. Las previsiones de la marca apuntan a unas ventas superiores a los 3.000 vehículos en un año completo, si la pandemia, la crisis de suministros, la guerra en Ucrania y otros desastres posibles no lo impiden.
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