Opel rescata las siglas GSe para sus vehículos eléctricos más deportivos
Para muchos seguidores de Opel y de los vehículos deportivos en general, las siglas GSE son sinónimo de coches de altas prestaciones y gran dinamismo como fueron el Commodore GS/E y el Monza GSE. La nueva era eléctrica trae consigo para estas tres letras mágicas un nuevo significado que se encierra en un mínimo cambio en la e, que pasa de mayúscula a minúscula. Mientras en el pasado GSE era la abreviatura de Grand Sport Inyection, ahora lo será de Grand Sport electric.
El cambio guarda relación con el ya conocido plan de Opel de ofrecer una versión electrificada de cada modelo de su gama antes de 2024 y, más allá de eso, de convertirse en una marca 100% eléctrica en Europa para el año 2028, estrategia que no difiere mucho de la del resto de los fabricantes. En este contexto, la marca de Rüsselsheim revive y redefine GSe como una nueva submarca para sus modelos tope de gama, como lo fueron antaño los mencionados Commodore y Monza.
Opel ya había amagado esta iniciativa que ahora se hace oficial cuando el año pasado mostró el Manta GSe Elektromod, un revival eléctrico de su legendario Manta cuyo proceso de producción relató con todo lujo de detalles. Un grupo de quemados de los coches dentro de la compañía se las ingenió para montar en una vieja unidad de 1974 un motor eléctrico de 147 CV y una batería de 31 kWh con la que podía recorrer unos 200 kilómetros, algunos más esmerándose en una conducción eficiente.
Acerca del Manta GSe Electromod, la marca alemana indica un año más tarde que “demuestra lo atemporales que siguen siendo hoy en día las líneas de 1970. Lo que era escultural y sencillo hace medio siglo sigue encajando a la perfección en la actual filosofía de diseño de Opel. Adopta una posición fuerte y clara, y comienza con confianza un nuevo futuro: eléctrico, sin emisiones y lleno de emociones”, indica.
El Manta GSe también representa una especie de homenaje al bello Manta A, que recientemente ha servido de inspiración para el diseño del nuevo frontal de la marca: el Opel Vizor, que integra orgánicamente en un solo módulo la parrilla, el sistema de iluminación y el logotipo del rayo, el Blitz. Todos los nuevos modelos de Opel lo incorporan ya, desde el Mokka -que lo estrenó- hasta los recién llegados Astra y Astra Sports Tourer.
El Manta GSe, que ha acumulado múltiples premios, continúa con la ruta “simplemente eléctrica” de electrificación de la marca, tanto en la gama de turismos como entre los vehículos comerciales ligeros. Para 2024, todos los modelos de la compañía estarán electrificados, y en la actualidad ya se puede elegir entre 12 modelos electrificados, desde híbridos enchufables como los Grandland y Astra hasta vehículos 100% eléctricos que abarcan desde el utilitario Corsa-e hasta el Zafira-e Life, y desde el Combo-e Cargo al Movano-e en el caso de los comerciales.
Diseño y prestaciones
Sobre la vuelta de los GSe a la carretera, el CEO de Opel, Florian Huettl, ha señalado lo siguiente: “Estoy muy contento de anunciar el retorno de GSe como nuestra submarca deportiva de alta gama para un futuro inmediato. Una vez más, nos hemos inspirado en nuestra valiosa herencia, al igual que sucedió con el aclamado nuevo diseño audaz y puro [de la marca Opel], y le hemos dado un toque moderno. En el futuro, el distintivo GSe no solo designará a los coches más dinámicos y divertidos de conducir; también significará Grand Sport electric, en consonancia con nuestro ambicioso objetivo de convertirnos en una marca 100% eléctrica”.
Los futuros modelos GSe no se distinguirán únicamente por su aspecto deportivo, basado en el nuevo diseño al que hace referencia Huettl, sino que Opel promete que dispondrán de “una configuración de chasis capaz de ofrecer un alto nivel de diversión y dinamismo al volante”. Y, al igual que todos los modelos de la marca, esta subgama tendrá garantía a prueba de Autobahn gracias a las pruebas exhaustivas llevadas a cabo en las autopistas alemanas sin límite de velocidad. Al mismo tiempo, los GSe combinarán estos valores con la opción de una movilidad sin emisiones, como exigen los nuevos tiempos, lo que redefine -afirman- el Zeitgeist (espíritu) de las prestaciones.