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“Confío en CCOO, a pesar de todo”

Daniel Bueno, exsecretario general de CCOO Región de Murcia / MJA

María José Alarcón

Murcia —

Una gestora se ha hecho cargo de la dirección de sindicato Comisiones Obreras en la Región de Murcia hasta la celebración del próximo congreso extraordinario. Y a la misma hora en la que se presentaba ante los medios el responsable de este órgano de dirección de transición, eldiario.es Región de Murcia hablaba con Daniel Bueno, el ya exsecretario general. Bueno, que se confiesa cansado por la presión sufrida, se ha apartado para dejar paso a un nuevo tiempo.

¿Qué tal está?

Bien, tranquilo. Creo que he hecho lo mejor para todos, dimitir y pedir que se forme una gestora que organice un congreso extraordinario y que sea en él donde se decida el camino a seguir.

En los partidos políticos hay un frase que se suele utilizar para casos como éste: “¡A suelo, que vienen los nuestros!”. ¿En su sindicato también ?

Yo creo que aquí se han dado circunstancias peculiares. Somos una organización que se caracteriza por el debate y en este caso no lo ha habido. Ha habido más división interna que debate, y yo prefiero lo último.

¿Se va usted por la puerta de atrás?

No lo creo. La gestora la he pedido yo, para poder salir del bloqueo en el que estamos. Es el momento de que sea el conjunto de la organización el que decida qué camino seguir, y que se haga democráticamente. El dialogo era complicado entre los dirigentes, hablábamos poco.

¿Y de qué estaban hablando cuando se han peleado? Si me permite la expresión...

De pocas cosas. De cosas básicamente internas. Estábamos dedicando demasiado tiempo a impugnaciones procedimentales en vez de estar pendientes de la política del sindicato. Hay que dedicarse a lo importante. Con la situación de crisis que tenemos es absurdo estar dedicados a lo interno y no a todas las necesidades de los trabajadores y trabajadoras.

¿Entonces, qué ha sido, un “quítate tu que me pongo yo”?

Sí, se puede calificar así. Se ha manifestado claramente una lucha por el poder interno, pero aquí no hay atajos. Para eso están los congresos.

¿Pero qué pasado con usted? ¿No ha hecho honor a su apellido en su gestión?

He intentado siempre actuar con la máxima responsabilidad, para que el trabajo que hacen centenares de personas que trabajan con dedicación en el sindicato para defender los intereses de los trabajadores, se viera lo menos dañado posible por este conflicto interno. Si eso ha significado tener que personalizarlo en mi, no me importa, lo doy por bien empleado.

¿Se va para siempre?

Sigo militando en CCOO, me siento parte de la organización. Tengo un compromiso con mucha gente que me ha apoyado y el tiempo dirá qué sucede en el próximo congreso.

¿Quiere eso decir que se va a volver a presentar de nuevo a Secretario General?

No lo sé. Puede ser. Creo que tenemos que cambiar muchas cosas para acercarnos más a la sociedad y estoy dispuesto a contribuir a ello.

¿Y a qué se va dedicar, mientras tanto?

Soy pedagogo, pero la verdad es que prácticamente nunca me he dedicado a eso. Siempre, desde muy joven, he trabajado en el sindicato, así que ahora llamaré a las puertas del Servicio de Empleo, como por desgracia lo hacen millones de españoles... De momento necesito parar un poco, repensarme y coger impulso.

Mientras charlamos, a pocos metros de aquí se está anunciando la gestora por Carlos Bravo, que ha venido de Madrid para ello. ¿Ha recogido el despacho?

Todavía no, tengo que pasar a recoger mis efectos personales, entre otras cosas más de cuarenta cuadernos con anotaciones y apuntes de todas las reuniones y gestiones que he ido anotando los últimos quince años, y que forman parte de mi historia personal y colectiva.

¿Qué se lleva y qué se deja?

La satisfacción de haber estado en una organización que representa los intereses de miles de personas frente a los gobiernos, no solo en el ámbito laboral, también en el social. Me llevo los recuerdos de los logros alcanzados en beneficio de los trabajadores y trabajadoras de esta región, afiliados o no. El haber podido contribuir a solucionar algún conflicto. Y me dejo la pena de no haber podido evitar llegar a esta situación a la que hemos llegado... Pero tengo la conciencia tranquila. Sé la parte de responsabilidad que me corresponde.

¿Estamos en tiempos de despedidas? Son muchos los que, como usted, están saliendo en nuestra Región de la foto oficial. ¿Están cambiando las cosas?

Posiblemente. Estamos ante un tiempo nuevo. Se han cometido muchos errores y la sociedad requiere de una renovación, de una regeneración en muchos estamentos: políticos, sindicales... De todo tipo. La gente así lo está reclamando. Hay que cambiar para dar nuevas respuestas, y sobre todo ofrecer soluciones a los ciudadanos que nos permitan seguir avanzando en derechos.

Póngale el titular a esta entrevista.

Confío en la organización en la que milito, en CCOO, y seguiré confiando en ella y en su gente.

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