VERGÜENZA ROBAR Y QUE TE PILLEN, dice muy a menudo un amigo mío, y qué razón tiene. Ya no entro en la ética personal, en la honradez que debe tener cualquier persona, sea político, notario o ferretero. Pero que te arriesgues a que te detenga la Guardia Civil en tu trabajo o en tu casa, delante de tus padres, pareja, hijos o nietos... ¿Cuánto dinero hay que robar para que te compense la desilusión de tu familia al verte despojado de galones y medallas como Gary Cooper en “El honor del capitán Lex”?