El Gobierno se aviene a que los navarros puedan proponer candidatos a recibir la Medalla de Oro
El Gobierno de Uxue Barkos acepta que la próxima Medalla de Oro, máxima distinción que se otorga en la Comunidad foral, que entregue la presidenta sea a un candidato propuesto por los ciudadanos. De entre las propuestas populares, será el Gobierno quien elija al galardonado final, pero tendrá que hacerlo impulsando con ello la paridad de género y teniendo en cuenta que los valores que se reconozcan con la concesión del premio sean “un ejemplo de actualidad”. Esta es la solución de participación a la que ha llegado el cuatripartito y con la que pretende dejar saldada la última y polémica concesión de la Medalla de Oro de Navarra a los diseñadores de la bandera foral. La iniciativa ha surgido de Podemos y, además del resto del cuatripartito, ha conseguido también el apoyo del PSN. Sin embargo, ha salido adelante porque Podemos ha cedido en sus pretensiones iniciales. La formación morada planteaba no sólo que sean los ciudadanos quienes propongan candidatos al galardón, sino también que fuese un jurado externo quien eligiese entre las candidaturas, previa audiencia del criterio de los grupos parlamentarios. A los socios del cuatripartito, al parecer, tanta participación ajena al Gobierno les ha parecido excesiva y la han eliminado de la propuesta de Podemos como condición para darle su apoyo. Podemos ha cedido y así ha conseguido aprobar este futuro cambio.
La concesión de la Medalla de Oro se regula a través de un decreto foral. Es el Gobierno quien tiene la potestad de modificarlo o aprobar otro que incluya los cambios propuestos, por lo que el Parlamento se ha limitado a aprobar una moción en la que insta al Gobierno a poner en marcha dichos cambios. Su entrada en vigor queda ahora en manos del Ejecutivo. A tenor de las críticas de todos los portavoces del cuatripartito hacia el decreto foral vigente, el Gobierno no tardará en modificarlo.
El portavoz de Podemos, Mikel Buill, ha considerado que la Medalla de Oro es un premio “partidista” a cuya concesión la sociedad navarra asiste “atónita”. Ha hecho especial hincapié en el escaso número de mujeres que ha recibido el galardón y también en lo lejano en el tiempo que se ve a las figuras premiadas. “Eso es vieja política, es necesario cambiarlo”, ha dicho.
