“Lanbide se ha olvidado de los desempleados”
Los sindicatos ELA, LAB, CCOO y UGT hanllevado hasta el Parlamento vasco su protesta por la forma en la que se está gestionando el Servicio Vasco de Empleo-Lanbide y que ya les ha llevado a paralizar las oficinas durante un día de huelga. Durante su comparecencia ante la comisión de Empleo de la Cámara vasca, las centrales han reclamado la “paralización” del nuevo modelo de organización que se quiere “imponer”. En su opinión, ese modelose enfoca más hacia la gestión de prestaciones sociales, como la Renta de Garantía de Ingresos (RGI), y se olvida “del origen de Lanbide y de las funciones que se le asignó al transferirse las políticas activas de empleo”.
“Basta ya de tanto 'petacho', de tanta decisión impuesta sin rumbo que no resuelve la problemática real del Servicio Vasco de Empleo”, han indicado. Así, han pedido al Gobierno vasco que desarrolle actuaciones destinadas a fomentar la creación de empleo como programas de formación, subvenciones, ayudas, orientación a particulares y empresas, intermediación y programas de incentivación para el empleo, o planes conjuntos con las corporaciones locales para la creación de empleo, entre otros. Por eso, reclaman que “no se vacíe de contenido las labores de técnicos y orientadores, ni se subcontrate con entidades colaboradoras dichas labores”.
En su opinión, el Gobierno Vasco prioriza las necesidades planteadas a corto plazo en la gestión de las prestaciones sociales y se olvida “de las necesidades que vertebran la reinserción laboral”. “La polivalencia de los trabajadores que plantea el nuevo modelo”, critican, “tiene como fin derivar los trabajadores a realizar tareas administrativas de gestión de las prestaciones sociales, olvidando a los desempleados de Euskadi y al servicio público que este gobierno se comprometió a prestarles cuando se negociaron las transferencias”.
Según han explicado, se pretenden instaurar dos niveles de atención: uno llevado a cabo por los auxiliares administrativos que se atiende sin cita; y un segundo nivel en el que los técnicos tutorizan los itinerarios y que son los encargados de la tramitación de RGI.
Externalización
Los cuatro sindicatos han denunciando que esta nueva estructuración de la plantilla tiene por objeto derivar a los trabajadores a realizar labores de gestión administrativa de las prestaciones sociales, “primando la externalización de los servicios de orientación y formación a entidades colaboradoras contratadas por la dirección”.
“Que todos los trabajadores sepan hacer de todo para dar un servicio con un mínimo de calidad es totalmente inviable”, han asegurado. “Es difícil confiar en un modelo que ni la propia dirección de Lanbide tiene claro” .
