Erkoreka: “No hay garantías de que el Estado no siga mermando las competencias de Euskadi”
El ‘número dos’ y portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, ya sin competencias en Justicia, ha sido reorientado en la segunda legislatura de Iñigo Urkullu como consejero de Gobernanza Pública y Autogobierno. Sobre esa cartera recae el peso de negociar las aún importantes transferencias pendientes del Estatuto de 1979, la resolución de contenciosos judiciales con el Estado y la gestión del proceso de actualización estatutaria que han pactado para la legislatura los dos socios del Ejecutivo, PNV y PSE-EE. En este terreno, Erkoreka encara la legislatura desde una doble constatación que mantiene las espadas en alto con el Gobierno central: que “es falso” que Euskadi sea la región infraestatal del mundo con más competencias y que no existe “la más mínima garantía” de que cuatro décadas después se vaya a completar el Estatuto o de que, incluso, no se vayan a restar poderes a la comunidad autónoma vasca.
Erkoreka, arropado por sus cuatro viceconsejeros y el resto de sus asesores, ha abierto este lunes en el Parlamento Vasco la ronda que en las dos próximas semanas realizarán todos los consejeros del gabinete de Urkullu para esbozar su programa de Gobierno. En el caso de Erkoreka, que ha consumido bastante más tiempo que el lehendakari en su investidura (casi cuatro horas), ha presentado un documento de 25 folios dividido en dos apartados, el relativo a la reforma de la Administración (informatización, transparencia o la renovación de una plantilla envejecida que verá cómo en 2030 se habrá jubilado el 68% de los funcionarios) y otro de mayor calado político centrado exclusivamente en materia de autogobierno. Han sido muchas reflexiones y numerosas propuestas (hasta cuatro proyectos de ley cuya fecha se conocerá el 23 de febrero y un código ético para los funcionarios y no sólo para los altos cargos). Pero también ha habido algunas omisiones. ¿Qué pasará con los salarios de los funcionarios en los próximos años?
La parte más esperada de la alocución de Erkoreka en la Cámara –que retoma el control al Gobierno más de medio año después por el parón estival y electoral- ha sido su reflexión sobre autogobierno, “un rasgo secular del acervo político” vasco. El portavoz del Gobierno de PNV y PSE-EE ha calificado la autonomía vasca como una “lucha librada por la sociedad en defensa de sus instituciones” y ha dado a tender que esa ‘lucha’ con España sigue más viva que nunca.
Cree que el Estatuto “no es una excepción” en ese sempiterno litigio con el Estado y ha denunciado no sólo su incumplimiento casi cuatro décadas después (el Ejecutivo remitirá al Parlamento un listado actualizado de los traspasos pendientes, sobre todo Seguridad Social, Transportes e Instituciones Penitenciarias) sino que el Gobierno del PP ha motivado que “las competencias ya asumidas sean constantemente achicadas por la implacable acción legislativa del Estado”. Por si todo ello fuera poco, Erkoreka ha repetido se teoría del árbitro comprado y ha dedicado varios folios a cuestionar al Tribunal Constitucional, al que ha llamado “tribunal de Estado que se dedica a legitimar acríticamente todas las vulneraciones de las competencias autonómicas”.
Estas manifestaciones han llegado en un pretendido clima de deshielo entre Madrid y Vitoria o, lo que es lo mismo, entre el PP y el PNV. En puertas de una negociación de los presupuestos generales del Estado y de las cuentas autonómicas, ambas partes cerraron un importante acuerdo de interpretación de la Ley Municipal que evita un recurso de inconstitucionalidad. No ha sido posible un pacto en lo relativo a la Ley de Adicciones, que regula el consumo de cannabis en clubes privados y que el Estado censura por entender que legaliza ‘de facto’ una droga prohibida en el Código Penal y con probados riesgos para la salud.
Y hay más leyes en discordia. La de Vivienda, la promovida contra el ‘fracking’, la que regula las iniciativas legislativas populares (ILP) y, sobre todo, la que reconoce a las víctimas de la violencia policial en democracia, además de otros asuntos cruciales como las OPE de la Ertzaintza. “No creo necesario insistir –ha dicho Erkoreka- en las razones por las que el Gobierno prefiere optar por la negociación bilateral en el seno de la Comisión Bilateral de Cooperación Euskadi-Estado [frente a] la judicialización de los conflictos competenciales. Llevar el asunto al Tribunal Constitucional, a este Tribunal Constitucional, para que una sentencia fije doctrina bendiciendo para siempre una vulneración competencial del Estado podría elevar el daño de provisional a definitivo e irreversible”.
En este marco, ha defendido que “el Gobierno vasco elaborará y pondrá a disposición del Parlamento” cuando éste se lo requiera “el quantum de autogobierno legalmente reconocido a Euskadi [en 1979] pero todavía pendiente de materialización”. El Erkoreka de 2017 no ha sido tan claro como el de 2013. En la comparecencia gemela de su primera legislatura, de febrero de ese año, el consejero sí fue más preciso y detalló cuáles eran las transferencias pendientes prioritarias. Hace cuatro años planteó una Seguridad Social vasca –materia nunca transferida antes por el Estado a ninguna comunidad-, asumir competencias que ejerce el Banco de España, de la gestión de “puertos y aeropuertos de interés general” y autopistas y, finalmente, de la transferencia de Prisiones, algo que sólo ha logrado Cataluña.
Finalmente, el consejero de Gobernanza Pública y Autogobierno ha dedicado un párrafo de sus 25 folios a reclamar “desde el mayor consenso” una “fórmula de actualización” del Estatuto de Gernika. El Gobierno defiende que el “protagonismo especial” en este proceso ha de ser del Parlamento y no del Ejecutivo. Erkoreka nada ha dicho sobre el derecho a decidir, el punto que separa a los dos socios del Gobierno, a PNV y PSE-EE, que han pactado activar la reforma estatutaria desde los cauces legales y constitucionales.
El PP al PNV: “Nos vamos a encontrar”
Tras la comparecencia de Erkoreka, el primero en tomar la palabra ha sido el representante del PP, Javier Ruiz de Arbulo. Significativamente, Ruiz de Arbulo ha iniciado su alocución con una “oferta de colaboración” que ha hecho extensiva a la ponencia de autogobierno que debatirá en el Parlamento la reforma del Estatuto siempre que el proceso respete el ordenamiento jurídico: “Nos vamos a encontrar”.
No obstante, el representante 'popular' ha realizado una dura crítica de las reflexiones del Gobierno sobre el Tribunal Constitucional, para lo cual Erkoreka se ha apoyado en votos particulares de magistrados del alto tribunal. “Utilizar el sistema de los votos particulares para poner en duda a órganos colegiados, si me lo permite, sería como utilizar las frases de un grupo minoritario para poner en duda las leyes de este Parlamento simplemente porque no estamos de acuerdo con ellas”, ha lanzado Ruiz de Arbulo.
Podemos reclama “transparencia” en las contratas
Por su parte, el portavoz de Elkarrekin Podemos, Lander Martínez, ha asegurado que hoy se ha vivido una nueva escena del “teatro” entre el PNV y el PP. En este sentido, ha hecho una petición a Erkoreka: “No sometan la dignidad del autogobierno a un mercadeo, a pactos oscuros con el PP”. A ello ha respondido Erkoreka, exportavoz del PNV en las Cortes Generales, que si el Estatuto está desarrollado “al 70%, supongamos” y no “al 40 o al 50%” es porque su partido lo ha metido en su “agenda”.
Al margen del autogobierno, Martínez se ha centrado durante su intervención en reclamar “transparencia” más allá de compromisos genéricos. Desde la coalición de Podemos, IU y Equo, han reiterado la necesidad de regular los 'lobbies' o grupos de presión y de poner coto a las “puertas giratorias” que “afectan” a PNV y PSE-EE -una aforada socialista ha tenido que disculparse tras reírse con un comentario de Martínez-. También ha reclamado “otra vuelta de tuerca” a los mecanismos de contratación pública para acabar con la opacidad.
Y EH Bildu pide “pasos hacia la soberanía”
Para Maddalen Iriarte, la 'hoja de ruta' hacia un nuevo estatus presentada por Erkoreka ha sido claramente insuficiente. “Tenemos que dar pasos hacia la soberanía”, ha reclamado con insistencia la representante de EH Bildu, que ha recordado que la pasada legislatura la coalición independentista planteó una Ley de Consultas como “instrumento para tomar decisiones”.
Iriarte no compra la apuesta por la “bilateralidad” con España que defiende el PNV porque, ha remarcado, es otra forma de “sumisión y dependencia”. “La soberanía se tiene o no se tiene y no se puede compartir lo que no se tiene”, ha manifestado la nueva portavoz de EH Bildu para los próximos cuatro años.
