Pedro Sánchez ha votado en una pequeña sala del Centro Cultural Volturno de Pozuelo de Alarcón, el municipio madrileño donde vive, donde el PP arrasa históricamente con mayoría absoluta. Los apoderados del PP se han quejado del despliegue mediático y uno de ellos ha amenazado con llamar a la Policía. Pero un agente de incógnito le ha explicado que es una situación normal que iba a durar poco tiempo y que sucedía también en otros casos, como el de Mariano Rajoy.