Plan de emergencia de IU para salvar los muebles en Madrid
Izquierda Unida parecía abocada a la irrelevancia política en la Comunidad de Madrid. Tras un mes de infarto, con la salida de la candidata Tania Sánchez, la pugna con el candidato al Ayuntamiento, Mauricio Valiente, y la expulsión de los portavoces municipal y autonómico, Ángel Pérez y Gregorio Gordo, la federación madrileña de la formación que dirige Cayo Lara ha retomado el aliento con la designación de Luis García Montero como cabeza de lista para las elecciones autonómicas del próximo mes de mayo. El escritor, militante de Izquierda Abierta, el partido liderado por Gaspar Llamazares y Montse Muñoz, era la última esperanza para, al menos, dar la batalla en los comicios.
El poeta tiene que pasar aún el trámite de un referéndum que le ratifique, una condición planteada por él mismo. García Montero había pedido también que su nombre no se use para azuzar la pelea interna y que la candidatura que encabece represente a una base amplia, desde el voto obrerista tradicional a la izquierda intelectual: “Un frente amplio progresista”, según personas conocedoras del proceso que prefieren mantener el anonimato.
La primera condición se cumplirá. La segunda, con toda probabilidad. El Consejo Político Regional de IUCM aprobó este viernes por unanimidad pedir a Montero que acepte el encargo. El órgano, el principal entre asambleas, contó con una asistencia del 72%. A la reunión no acudió una parte del sector que apoya a Mauricio Valiente, quienes no reconocen la legitimidad de la actual dirección. Sin embargo, otras personas próximas al candidato a la Alcaldía de Madrid sí participaron.
El apoyo recibido por Montero se observa también en quienes propusieron oficialmente su nombre: los excandidatos en las primarias de noviembre, Julián Sánchez-Vizcaíno y José Antonio Moreno. Ambos perdieron contra Sánchez y podrían haber reclamado su lugar, algo a lo que han renunciado. En el proceso interno, además, ambos representaban a dos de los principales sectores tradicionales de IUCM. El simbolismo de su apoyo expreso augura a Montero el respaldo de buena parte de la militancia.
Otra candidatura para confluir
La última de las condiciones habrá que empezar a cumplirla a partir de ahora. Fuentes de la dirección colegiada de IUCM recuerdan a eldiario.es que la organización, tanto a nivel federal como regional, ha aprobado fomentar la convergencia. “Esa sigue siendo nuestra intención”, señalan. Eso sí, “en coalición electoral”. IU de Madrid entra así en la pugna por lograr apoyos para montar una candidatura amplia. Para “confluir” en un espacio en el que ya están Convocatoria por Madrid, la iniciativa liderada por Tania Sánchez, y Podemos. “Tiene que ser un proceso con IU más que un proceso de IU”, aseguran fuentes próximas a Montero.
Sobre la candidatura flotan los fantasmas de Ángel Pérez y Gregorio Gordo, expulsados por la direccion federal de IU por su responsabilidad política en la gestión de Caja Madrid y Bankia. Ambos han rechazado abandonar sus actas y han amenazado con llevar a la organización a los tribunales.
El nombre de Montero surgió hace un par de semanas en alguna de las asambleas locales convocadas por la dirección regional para, precisamente, proponer candidatos para sustituir a Sánchez. La opción del poeta fue cogiendo fuerza ante la ausencia de alternativas reales de peso y con proyección mediática en un entorno político, el madrileño, atomizado como nunca.
Los movimientos internos para propiciar la candidatura de Montero han sido muy rápidos y a distintos niveles. Montero cuenta con el apoyo de buena parte de la dirección federal. No en vano, hace unos meses presentó a Cayo Lara en un desayuno informativo. El candidato a las generales, Alberto Garzón, declaró el viernes por la mañana que consideraba acertada su elección, si finalmente aceptaba. También sectores el PCE, y de su propio partido, Izquierda Abierta le apoyan, aunque ningún órgano, salvo en IUCM, ha debatido su figura.
