Rajoy reduce a PSOE y Ciudadanos su anunciada “ronda de contactos” para responder al 1-O y a Puigdemont
Mariano Rajoy no ha cumplido su palabra de realizar “una ronda de contactos” con todas las fuerzas políticas parlamentarias para intercambiar posiciones sobre el conflicto de Catalunya. El presidente del Gobierno ha reducido esos anunciados encuentros a varias entrevistas y conversaciones telefónicas con el líder del PSOE, Pedro Sánchez, y con el presidente de Ciudadanos Albert Rivera. El resto de los portavoces de los grupos del Congreso han sido marginados y excluidos por Rajoy de esa ronda de contactos.
El anuncio de sus intenciones de “diálogo” fue realizado por el propio Rajoy el pasado 1 de octubre tras la celebración del referéndum en Catalunya declarado ilegal por el Tribunal Constitucional. El presidente se mostró muy preocupado por los acontecimientos, que terminaron con numerosos heridos tras las duras cargas policiales y citó al día siguiente en su despacho de La Moncloa a Pedro Sánchez, que acudió por la mañana, y a Albert Rivera, que lo hizo por la tarde.
Rajoy abordó con los dos líderes las “posibles respuestas políticas a la grave situación de desobediencia institucional que se estaba viviendo en esa Comunidad Autónoma”.
Desde entonces, los encuentros y conversaciones con ambos líderes han sido habituales y permanentes. Sobre todo con Pedro Sánchez, con el que ha cerrado un acuerdo para iniciar la reforma de la Constitución, y ha consensuado los pasos a seguir ante el empecinamiento del presidente del Govern, Carles Puigdemont, de seguir adelante con sus planes independentistas.
Tras ese primer encuentro oficial por separado con ambos dirigentes, La Moncloa emitió un comunicado en el que, además de agradecer a Sánchez y a Rivera “la sinceridad a la hora de exponer sus posiciones y la lealtad que ambos han mostrado a nuestro orden constitucional”, se señalaba la intención del presidente de continuar con esa ronda de contactos.
“El presidente del Gobierno ha mostrado su disposición a estudiar con responsabilidad y lealtad las propuestas que el resto de fuerzas políticas quieran formular, en el bien entendido de que solo están animadas por la búsqueda del bien común y la defensa de nuestro sistema democrático”, se explicaba.
Por si no quedaba claro, al final del comunicado se insistía en que el Gobierno “mantiene su compromiso de seguir buscando con el resto de fuerzas políticas una respuesta conjunta al desafío independentista dentro del marco del respeto a la legalidad, requisito previo de cualquier actividad política”.
Pero el presidente no ha cumplido su palabra y no ha recibido hasta ahora a ningún otro portavoz o líder del resto de los partidos que cuentan con representación parlamentaria en el Congreso y en el Senado.
Hasta ahora, y a pesar de la gravedad de los acontecimientos, Rajoy no ha querido compartir información ni con Pablo Iglesias, ni con Alberto Garzón, de Unidos Podemos, ni con representantes de sus confluencias. Tampoco ha convocado a consulta a Carles Campuzano, del PDeCAT, ni a Joan Tardà, de ERC, portavoces de los principales partidos protagonistas del “conflicto”; ni a Aitor Esteban, del PNV, partido que se ha situado junto a los independentistas y ha condicionado el apoyo a los Presupuestos de 2018 a que el Gobierno no aplique medidas contra Catalunya, como el anunciado artículo 155 de la Constitución.
Quejas de Alberto Garzón
En una comparecencia realizada este jueves en el Congreso para valorar la respuesta de Puigdemont al segundo requerimiento del Gobierno, el líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha lamentado la actitud de Rajoy. “Nos preocupa la falta de ánimo dialogante de Mariano Rajoy que ha vuelto a llamar solo al PSOE y a Ciudadanos y no la resto de las fuerzas políticas del Parlamento”, ha dicho.
“Estamos abiertos a cualquier tipo de diálogo pero lo que está haciendo en estos momentos Rajoy con Sánchez y Rivera no es dialogar, está cerrando una vía fundamentalmente represiva que no era necesaria”, ha añadido el diputado de UP.
Aunque ningún portavoz del PDeCAT ha sido llamado a la Moncloa, fuentes de la antigua Convergencia reconocen a eldiario.es que hay dirigentes del partido que desde Barcelona mantienen líneas de diálogo con el Gobierno central. “Hay abiertas negociaciones a través de intermediarios”, aseguran esas fuentes, que reconocen, eso sí, que “con poco éxito” a tenor de los resultados.
Desde ERC se asegura categóricamente que “no hay nada de nada” y que tampoco esperan que el Presidente les convoque “ni ahora ni más adelante”. Parecida respuesta da Aitor Esteban, quien al ser preguntado si piensa que él sí será llamado a consulta por Rajoy replica: “Los molinos imaginarios no hacen harina”.
También han sido ignorados por Rajoy los portavoces de los grupos minoritarios de la Cámara baja: CC; UPN; Foro Asturias o Bildu. Únicamente la canaria Ana Oramas ha reconocido que ha mantenido a lo largo de estos días “alguna charla telefónica” con la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría. Oramas ha asegurado que también el presidente canario, Fernando Clavijo, tiene una “relación fluida” con Rajoy desde que se inició la crisis con Catalunya.
En ausencia de Rajoy, que se encuentra en Bruselas, Sáenz de Santamaría ha sido este jueves la encargada de recibir en la Moncloa a la dirigente del PSOE, Carmen Calvo, a la que ha informado de la decisión del Gobierno de aplicar el artículo 155 de la Constitución. Con este fin la Mesa del Senado se reunirá este sábado tras la celebración del Consejo de Ministros extraordinario.