El voto presencial daría un principio de ventaja a Susana Díaz en Andalucía

El voto presencial en las primarias del PSOE supone, en principio, una ventaja para que Susana Díaz se imponga en su territorio donde el aparato controla hasta el último rincón. No ya sólo porque cuando un militante se ve obligado a votar en la sede en las agrupaciones más pequeñas es inevitable la presión, sino porque no todos los candidatos pueden permitirse tener interventores hasta el último rincón del territorio.

Es cierto que inicialmente Susana Díaz tiene garantizada esa capacidad de desplegar a gente por todo el territorio, que se le presume más complicada a Pedro Sánchez y sobre todo a Patxi López, si quieren tener un control de cómo se desarrollan las votaciones en todos los puntos en los que se pongan urnas. El conocimiento del terreno permite saber quién ha ido a votar y quién no y por tanto contrastar luego con los resultados y en eso está una de las claves del condicionamiento que puede sentir el militante. Pero también es verdad que el voto es en cabina, lo que para la dirección del PSOE-A “garantiza la absoluta libertad y confidencialidad”.

En este contexto, los sanchistas han insistido en la necesidad de que se habilite la fórmula del voto telemático, conscientes, por un lado, de la facilidades que ofrece a la hora de votar, y por otro, de las garantías de privacidad e infalibilidad que, dicen, dan los resultados de una máquina. Pero la gestora se ha negado porque no está en los estatutos del partido y no lo ha incluido para el reglamento de este proceso. Con ello, la gestora da alas a lo que defienden desde la dirección del PSOE de Andalucía, que tampoco quieren voto por internet.

El portavoz de la gestora, el diputado del Parlamento de Andalucía Mario Jiménez, hombre de la máxima confianza de Susana Díaz, decía este miércoles: “Es indispensable mantener un respeto escrupuloso a los procedimientos que nos hemos dado y que bajo ningún concepto se haga un planteamiento que pueda suponer un cuestionamiento de esas normas”. Manifestaciones que han coincidido con el envío de una carta de los sanchistas a la gestora para exigirle una reunión en la que se aborde la garantía de equidad por parte de la misma.

Unas afirmaciones que han enojado en el PSOE-A por entender que el equipo de Pedro Sánchez “siembra dudas sobre el proceso”. Fuentes del partido en Andalucía recordaban también que “ese planteamiento no tiene sentido”, menos cuando los precedentes muestran que no suele ganar el candidato oficialista, presumiendo con ello que Susana Díaz es la apuesta del aparato.

El secretario de Organización del PSOE-A, Juan Cornejo, ya había abogado por el voto presencial el pasado lunes, cuando renegaba de otras fórmulas, en las que “nadie sabe de dónde viene la papeleta”. Después de evitar prometer la neutralidad del PSOE-A, ya que “eso corresponde a la gestora porque es un proceso federal”, se mostraba seguro de que la misma “va a garantizar la limpieza del proceso”. Para comentar: “No quiero ser pretencioso pero vamos a dar ejemplo una vez más”.

En esta línea, sostiene que su papel como secretario de Organización del PSOE-A está en “garantizar que cada compañero ejerza en libertad su posición”. Entre otras cosas, ocuparse de que estén abiertas todas las sedes, para que cada militante pueda ejercer su derecho, “como ningún otro partido es capaz de hacerlo en este país porque no existe comparación”, en referencia a la vía telématica que emplean por ejemplo Podemos y C's. Tras confiar en que la gestora iba a optar por el voto presencial, Juan Cornejo se deshacía en elogios hacia este método tradicional, donde “cada uno puede poner su interventor”.