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Así funcionan los drones que el Gobierno planea usar para vigilar la frontera española

Reproducción de las imágenes tomadas por un dron al detectar fuego, estimación calórica y personas desde el aire. Imagen cedida por Aeorum

Gonzalo Testa

Se llama 'Surveiron', es un sistema de “inteligencia artificial y vigilancia avanzada” basado en el uso de drones, y el Ministerio del Interior confía en que se convierta en su nueva solución para blindar la valla de Ceuta tras la entrada de cerca de 900 migrantes durante la última semana.

El Ministerio del Interior planea emplear pequeñas aeronaves no tripuladas para detectar el acercamiento de migrantes al vallado fronterizo. El secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, quiere recurrir a los drones para ganar “capacidad de despliegue operativo a cualquier hora, sea festivo o no”, y “depender menos” de que Marruecos tenga más o menos voluntad o capacidad para cooperar.

Para conseguirlo se ha puesto en manos de los ingenieros informáticos y de telecomunicaciones de Aeorum, una 'spin-off' de la Universidad de Málaga que ya ha desarrollado un cerebro artificial capaz de vigilar y enviar información en tiempo real al centro de control remoto para guiar la toma de decisiones. Interior espera tener “lo antes posible” una propuesta concreta de aplicación del sistema para controlar el perímetro de la ciudad autónoma.

Según el gerente de la compañía, Jesús García, de consumarse la petición de Interior sería “el primer caso de utilización de drones para vigilar en tiempo real un espacio fronterizo”. Estados Unidos lo hace con aparatos similares, pero en diferido, desde hace años en su perímetro con México.

'Surveiron' coordina el envío de drones equipados con la tecnología necesaria en cada caso (cámaras térmicas, de movimiento, de visión nocturna...) para remitir la información que recopilan a un centro de control y reproducirla en tres dimensiones “para que operadores humanos los evalúen simultáneamente más fácilmente”. También puede “aconsejar planes de acción con tecnología de toma de decisiones sobre las directrices operativas o legales preestablecidas”.

La empresa ha implantado ya en espacios como La Moncloa o el Palacio de La Zarzuela alguna de las “soluciones tecnológicas” que lleva desarrollando durante los últimos cinco años de la mano de las Fuerzas de Seguridad, el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), Presidencia del Gobierno y Casa Real para, por ejemplo, combatir el uso ilegal o irresponsable de drones, en este caso con la plataforma 'Dronecaptor'.

Sin financiación estatal, la compañía ha captado un total de 24 millones de euros de fondos europeos a través de la línea de ayudas dedicada a 'Proteger la libertad y la seguridad de Europa y sus ciudadanos'.

“Hemos vinculado nuestro trabajo de investigación y desarrollo a una suerte de 'estrategia de Estado' desde la convicción de que, además de usar bien el apoyo público, es conveniente revertir ese respaldo en economía, conocimiento, puestos de trabajo y el desarrollo de modelos escalables de seguridad para España y otros países de la Unión Europea”, explica García.

El objetivo es 'producir' seguridad más barata aprovechando las nuevas tecnologías, aseguran. 'Surveiron' está concebido para controlar la valla sin despliegues de recursos humanos. El coste unitario de cada aparato no bajaría de 20.000 euros y aumentaría “en función de la autonomía de vuelo o nivel de generación de ruido que se requiera y de su nivel de equipamiento tecnológico”.

Respuesta a los puntos ciegos en la valla

Interior, que antes barajó colocar globos aerostáticos junto a la valla, valora que el control de los drones se pueda hacer desde una sala de control ubicada en Ceuta “o en la Dirección General de la Guardia Civil en Madrid”, según ejemplificó Nieto.

Para García, la trascendencia del proyecto no radica en las aeronaves sino “en la información que suministrarían de forma permanente, que es lo que necesitan las Fuerzas de Seguridad para decidir sus despliegues operativos y mejorar sus capacidades”.

La Guardia Civil dispone desde hace años en el perímetro de Ceuta de cámaras térmicas pero, con el paso del tiempo, los migrantes han descubierto zonas que son ciegas para el Instituto Armado. Si Marruecos no despliega efectivos en los bosques, los migrantes pueden acercarse a la alambrada con mayor facilidad y, como ocurrió durante los últimas entradas, pueden acceder a la valla y cortar sus alambradas sin que los guardias civiles tengan tiempo para movilizarse.

El PSOE ha registrado esta semana en el Congreso una Proposición no de Ley en la que insta al Gobierno tanto a enviar más agentes a Ceuta como a “aumentar la tecnología de control de la frontera con el uso, entre otros, de aeronaves no tripuladas, radares, sensores de movimiento y alarmas acústicas y lumínicas de alta intensidad en todo el perímetro”.

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