El PSOE negocia con las confluencias fórmulas alternativas a la creación de grupos parlamentarios
El PSOE no quiere permitir que las candidaturas que se presentaron vinculadas a Podemos en Galicia, Cataluña y Comunidad Valenciana tengan grupo parlamentario propio. La decisión no está cerrada, pero de ella dependerá en buena medida las opciones de Pedro Sánchez para conseguir el apoyo de Podemos y las confluencias en una virtual investidura del socialista.
Pese a su posición inicial en contra, el negociador socialista, Antonio Hernando, se ha reunido este lunes con los responsables de las confluencias para sondear apoyos de cara a la configuración de la Mesa del Congreso y ante una eventual investidura de Sánchez.
Fuentes parlamentarias del PSOE repiten el argumentario que el PP también hace suyo: las confluencias son Podemos y, por tanto, no pueden tener grupo propio. El reglamento del Congreso aclara que para tener grupo propio es necesario haber obtenido un 15% de los votos en las circunscripciones en las que se ha concurrido y, además, tener al menos cinco diputados. Todas las confluencias asociadas con Podemos cumplen esta premisa, pero se enfrentan ahora a la acusación de que sus cuatro grupos parlamentarios serían cuatro partes de la misma cosa.
Frente a esta situación está la de otras formaciones como ERC que no han conseguido el 15% de los votos que exige el reglamento pero que, con toda probabilidad, acabará teniendo grupo propio. Los republicanos catalanes lograron un 15,98% de los sufragios en Cataluña, pero no lograron superar el 15% en la circunscripción de Barcelona, donde obtuvieron un 14,48%. El reglamento del Congreso exige superar ese porcentaje en todas las circunscripciones en las que se concurre como condición para tener grupo propio. ERC logró un 23,44% en Girona, un 22,26% en Lleida, y un 17,48% en Tarragona.
Quedan pocas horas para que los principales partidos negocien la posibilidad de apoyos para decidir la presidencia del Congreso. Los socialistas ya han puesto encima de la mesa el nombre de Patxi López. El lehendakari se ha apresurado a pregonar la postura oficial de su partido, contraria a la configuración de cuatro grupos.
En este contexto, el PSOE trabaja en la búsqueda de nuevos apoyos y no descarta ceder uno de los puestos que le toca en la Mesa del Congreso para cedérselo al Partido Nacionalista Vasco. Los seis diputados del PNV no parecen suficientes para equilibrar ninguna balanza en favor de Sánchez pero en Ferraz no quieren dar por perdido ni un solo voto por si los equilibrios finales los convirtiesen en necesarios.
Los socialistas dan por hecho que sacarán adelante el nombramiento de López como presidente del Congreso. No será por mayoría absoluta pero consideran que lograrán más votos que el candidato del PP. El PSOE aspira a lograr el voto favorable en la segunda ronda al menos de Ciudadanos. Con los 40 votos de los de Albert Rivera conseguirían superar los 123 del PP. Piensan que los demás grupos no votarían a favor del PP sino que como mucho se abstendrían, por lo que lograrían tener más votos a favor del exlehendakari.
Las negociaciones seguirán a lo largo de este martes y pueden prolongarse hasta primera hora del miércoles. El Pleno de composición de las Cortes arranca a las 10 de la mañana. Fuentes parlamentarias socialistas expresan que Ciudadanos saldría ganando si alcanza un acuerdo con el PSOE para ocupar más puestos en la Mesa de lo que le correspondería. No obstante, todo sigue muy abierto puesto que el partido de Rivera está también negociando con el PP.
