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El ministro Rafael Catalá bromea con el interés de los medios: “Ya sé lo que siente Justin Bieber”

El ministro de Justicia, Rafael Catalá.

elDiario.es Política

“Ya sé lo que siente Justin Bieber”. Así ha bromeado el ministro de Justicia, Rafael Catalá, tras desdeñar a las decenas de periodistas y de cámaras que le esperaban este miércoles por la tarde en el acto de clausura del II Congreso de la Abogacía Madrileña, organizado por el Colegio de Abogados de Madrid.

La periodista Marta Nebot, que lo ha contado por Twitter.

“Ha hecho el paseíllo con la presidenta del consejo general de la abogacía, Victoria Ortega”, explica Nebot. “Y él, después de sus gracias por venir 'a pesar de la presión mediática', ha hecho la broma”.

Rafael Catalá fue ascendido a ministro de Justicia a finales de septiembre de 2014, tras la dimisión de Alberto Ruiz Gallardón. Desde esa responsabilidad ha ejercido como protector de sus compañeros de partido investigados por los tribunales, ha asistido a comidas con condenados por corrupción y ha despreciado públicamente confesiones que apuntaban a la corrupción en el seno del Gobierno de José María Aznar.

El sms a Ignacio González es la última línea del currículum del titular de la cartera de Justicia, que incluye una reunión con el expresidente de Murcia Pedro Antonio Sánchez en mitad de su problemas judiciales con Púnica y una reprimenda pública a las fiscales que le acusaban de tres delitos de corrupción. Su mensaje al expresidente de la Comunidad de Madrid, confiando en la pronta solución de sus “líos”, ha vuelto a poner de manifiesto su actitud protectora con los compañeros de militancia que tienen problemas judiciales.

“Gracias Nacho. Un fuerte abrazo. Ojalá se cierren pronto los líos”, escribió el ministro de Justicia a González el pasado 3 de noviembre. El expresidente madrileño llevaba ya varios meses imputado en el caso Ático, que investiga la compra de un piso de lujo en Marbella, y en junio de ese año se había judicializado el caso Lezo, que le ha enviado a prisión incondicional por sus negocios con el Canal de Isabel II.

Crisis en la Fiscalía

El fiscal jefe de Anticorrupción, Manuel Moix, quiere apartar al fiscal del caso Lezo, la investigación que ha llevado a Soto del Real al expresidente madrileño Ignacio González. Moix le ha pedido a Carlos Yáñez que renuncie a su plaza en Madrid y vuelva a su puesto en Granada, pero el fiscal de la Operación Lezo se ha negado a presentar la renuncia, han informado a eldiario.es fuentes de la fiscalía especializada.

La cadena Ser ha adelantado las intenciones del fiscal jefe Anticorrupción. Con posterioridad, el organismo ha hecho pública una nota en la que niega que se haya apartado a Yáñez de la investigación y añade que Moix “ha solicitado recientemente la renovación de su plaza en comisión de servicios” en la fiscalía especializada. La nota no aclara cuándo se produjo esa petición de renovación y qué ha ocurrido después.

Yáñez dirige los interrogatorios del caso Lezo junto con la fiscal Carmen García. Los dos fiscales del caso forzaron una junta de fiscales cuando Moix intentó frenar uno de los registros de la operación, que finalmente se saldó con la detención, entre otros, del expresidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González. En la junta de fiscales, todos menos uno de sus integrantes apoyaron a los fiscales del caso en contra del criterio de su jefe y Moix cedió.

El papel de Moix en esta investigación por los negocios del Canal de Isabel II ha quedado en entredicho desde el principio. Además de sus intentos de frenar un registro, las conversaciones grabadas a González revelan que quiso maniobrar para situarle al frente de Anticorrupción: “A ver si podemos poner a Moix en Anticorrupción, es un tío serio”.

Además de la investigación principal del caso Lezo, Yáñez también andaba tras una derivada del caso. Trataba de averiguar qué magistrada avisó a los implicados de que se les estaba investigando, como revela una de las conversaciones grabadas que obran en manos de los fiscales.

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