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El Ayuntamiento de Córdoba investiga si en los bienes inmatriculados por la iglesia hay propiedades municipales

Vecinos se concentran para exigir la restitución como bien público de la Plaza de la Fuesanta de Córdoba inmatriculada por la Iglesia.

Carmen Reina

El Ayuntamiento de Córdoba está investigando los bienes inmatriculados por la Iglesia a su nombre en el Registro de la Propiedad por si alguno de ellos fueran en realidad públicos y esta investigación ya ha arrojado sus primeros resultados. Se trata de dos bienes sobre los que cabría reclamar su titularidad pública: una ermita y distintos espacios de una plaza pública.

El Consistorio cordobés requirió en su día “certificado sobre las inmatriculaciones registradas a nombre del Cabildo de Córdoba, a todos los registros de la propiedad de nuestra ciudad”, según consta en un escrito de la alcaldesa, Isabel Ambrosio, en respuesta sobre este asunto al grupo municipal de Ganemos Córdoba.

En dicho escrito, al que ha tenido acceso eldiario.es Andalucia, consta que toda la información recabada de los siete Registros de la Propiedad de la capital cordobesa se dirigió a la Gerencia Municipal de Urbanismo para que fuera ésta la que iniciara una investigación con el fin de comprobar si las inmatriculaciones afectaban a bienes municipales.

Así, sobre el listado de inmatriculaciones halladas –del que no se ha hecho público cuántos bienes lo componen- se trasladó solicitud de informe a Urbanismo para que aportase concretamente “información relacionada con el conjunto de bienes inscritos en los distintos Registros de la Propiedad de Córdoba a favor de la Diócesis de Córdoba por su posible afección a bienes de titularidad municipal”, según indica el escrito de la alcaldesa. Y, de momento, Urbanismo ha señalado directamente a dos casos concretos en los que se habrían encontrado “títulos de propiedad que resultarían contradictorios”.

Se trata de la Ermita de los Santos Mártires, junto al río Guadalquivir, y de espacios de la Plaza de Nuestra Señora de la Fuensanta. Por un lado, se señala a la ermita sobre la que, en estos momentos, se está “completando su expediente de investigación” y por otro lado, se apunta a “espacios libres existentes entre las construcciones destinadas a uso religioso, vivienda y almacén sitas en la Plaza Nuestra Señora de la Fuensanta, actualmente en proceso judicial”. Y es que sobre esta plaza, tras protestas vecinales, ya abrió un expediente administrativo el propio Ayuntamiento para reclamársela a la Iglesia, procedimiento administrativo sobre el que el Cabildo presentó un recurso judicial y logró parar al considerar los tribunales que el acuerdo de la Junta de Gobierno municipal del consistorio no era el órgano que debía haber tomado la decisión de reclamar la plaza.

Así las cosas, ahora la plaza pública se incluye dentro de este nuevo intento del Ayuntamiento que trata de averiguar la totalidad de bienes inmatriculados por la Iglesia en la capital. Sobre ese listado completo prosigue la investigación desde el área de Urbanismo, que deberá ofrecer como resultado un informe con los bienes públicos que hayan sido registrados por la Iglesia y sobre los que el Ayuntamiento pueda actuar para reclamar su titularidad.

El alcance de la operación urbanística sobre bienes públicos

Este escrito de la alcaldesa responde a una petición formulada en el Pleno municipal por el grupo Ganemos Córdoba para que se hiciera público el listado de las inmatriculaciones que pudieran afectar a bienes municipales y conocer así “el alcance de esta operación urbanística sobre el patrimonio de los bienes públicos y municipales”.

Isabel Ambrosio señala sobre este extremo que se trata de una “documentación que obra en el oportuno expediente abierto en nuestro departamento de Patrimonio, y que se encuentra a disposición de los y las capitulares que quieran hacer cualquier consulta sobre este extremo”, aunque a esta consulta no puedan acceder más personas que los concejales.

De hecho, sobre la exposición pública de este listado se limita a decir que “las propiedades inmatriculadas a nombre de la Iglesia Católica, como las registradas a nombre de cualquier sujeto de naturaleza pública o privada, son públicas en cuanto cualquier ciudadano o ciudadana puede solicitar al Registro de la Propiedad que corresponda información sobre la pertenencia o no de algún edificio o terreno a quien en cada momento pudiere considerarse propietario”.

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