Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
Gobierno y PP reducen a un acuerdo mínimo en vivienda la Conferencia de Presidentes
Incertidumbre en los Altos del Golán mientras las tropas israelíes se adentran en Siria
Opinión - ¡Con los jueces hemos topado! Por Esther Palomera
Sobre este blog

Desdeelsur es un espacio de expresión de opinión sobre y desde Andalucía. Un depósito de ideas para compartir y de reflexiones en las que participar

¿Lo hacemos?

Treintañeros y ciudades medianas, objetivo de los partidos para el 26J

María Iglesias

A medida que el horizonte de las nuevas elecciones se acerca, vemos las urnas cada vez más grandes, como pasa en la carretera con los toros de Osborne. La urna, igual que el toro, impone. Porque uno quisiera que su voto determinara la realidad, que sirviera, que cambiara este país, que acabara con el paro, la desigualdad, la corrupción, el enchufismo.

Que le diera la vuelta al calcetín y quienes pasan el día pontificando sobre apretarse el cinturón, resignarse a la muerte del empleo estable, desde poltronas con sueldazos a las que no han llegado ni por selección de personal ni opositando, tuvieran que competir por su puesto vía CV y entrevistas... Añadiría que visitando las oficias del INEM, si conociera a alguien que hubiera encontrado ahí trabajo.

Tenemos el ejemplo reciente de Austria donde cada voto ha sido necesario para que el presidente de la República sea un ecologista hijo de emigrantes en lugar de un filo-nazi.

Las encuestas dan buenas opciones a Unidos-Podemos. Ojo que Ciudadanos con el viaje de Rivera a Venezuela y el vídeo de campaña está ofreciendo no fuegos fatuos, sino un proyecto serio. Pero, de momento, son los primeros quienes corren hacia el portero contrario: la portería se agiganta, hay opciones de marcar gol, aunque pese a la ilusión óptica, se puede fallar. O perdonar.

Un novato que no sentencia acaba pagándolo. Sobre todo cuando juega ante un equipo veterano, que lleva cuarenta años repitiendo esquema táctico. Son muchos los votantes, incluso progresistas, que prefieren malo conocido a estrella emergente.

Se entiende. Al fin y al cabo, no hablamos de ganar una copa, sino de gobernar un país, del destino de casi cincuenta millones de personas. Y la generación que se postula, por más preparada que esté, más estudios que tenga, es joven e inexperta. ¡A ver, que no han cumplido los 40! Que es lo que tenía González cuando ganó en el 82, Suárez y Aznar tenían 43, Zapatero 44 y Rajoy 56. ¡Más decano, al llegar al Gobierno, que Calvo Sotelo! Aunque este pareciera más añejo por culpa de la TV en blanco y negro.

Lo de la edad es un detalle, la responsabilidad es lo importante. A “Pablo Manuel” -como de repente oigo a muchos llamarle- se le nota “ansia de poder”. Y en esto es pionero. Los seis antes citados llegaron a presidentes, como cualquiera en la comunidad de vecinos, tras resistirse muchísimo, sin quererlo, por cumplir con su deber. Alberto Garzón “el Bueno”, será un muñeco de cera en manos de este Maquiavelo.

Y sobre todo, la verdad, ¿que qué necesidad, menos aún urgencia, hay de cambiar? Como si no funcionara el sistema, el país, las vidas de cada uno de los individuos que lo constituimos. Como si no tuviéramos pleno empleo, y a cada nueva hornada de licenciados trabajando, en lo que quiere, para lo que está preparada, realizándose y engrandeciendo el Estado, haciéndolo puntero en los sectores estratégicos, garantizando las pensiones y el panorama venidero. Como si los grandes partidos e instituciones, de la Corona abajo, no fueran un ejemplo de maquinaria engrasada y eficaz.

Mira lo que te digo, que cambiar es de noveleros. Que vivimos mejor que merecemos. Y no hay margen de perfección, además. Primero, que Europa, la Troika, los poderes fácticos no nos dejarían. Y después, que todo el que llegue nos defraudará.

Miedo, sólo miedo. Todo es susceptible de empeorar, como con tan buena intención nos recuerda el ex director de El Mundo, Casimiro García-Abadillo. Así que no movamos un pelo. Sigamos el ejemplo de nuestro capitán cuya estrategia para vencer de nuevo es quedarse quieto. Tiempo habrá de relevo. ¡Acaso no está ahí Carlos de Inglaterra como ejemplo!

Aunque... ¿Os imagináis por primera vez un Gobierno distinto al bipartidismo? ¿Será malo malísimo sentir curiosidad? ¿Probar a ver qué tal? Sabiendo que, si sale mal, siempre podemos volver a lo que funciona de vicio... Ay, que me entran los nervios. ¿Lo hacemos o no lo hacemos?

Sobre este blog

Desdeelsur es un espacio de expresión de opinión sobre y desde Andalucía. Un depósito de ideas para compartir y de reflexiones en las que participar

Etiquetas
stats