Borrasca Justine en Andalucía: ambiente lluvioso y fuerte viento en la mitad oriental para despedir enero
El cierre de enero en Andalucía ha tenido un leve, y breve, sabor primaveral. Las temperaturas mínimas y máximas han experimentado un fuerte ascenso, que han llevado a situar los termómetros de algunos puntos de la región, en especial de la costa y el extremo oriental, en valores propios del mes de abril. Las tardes del miércoles 27 y el jueves 28 de enero se superaban los 25 grados en amplias zonas de la franja mediterránea andaluza, mientras que el valle del Guadalquivir rebasaba por primera vez en todo 2021 la barrera de los 20 grados. Registros que se han situado una media de unos 7 a 8 grados por encima de los valores normales para la época del año y que volverán a repetirse en los primeros días de febrero.
Fuerte viento y lluvia débil desde las Islas Británicas
La atmósfera andaluza volverá a quedar a expensas del ambiente lluvioso durante el fin de semana gracias al paso de un débil sistema frontal asociado a la borrasca Justine. Su alejada localización, al sur de las Islas Británicas, hará que los efectos más adversos, por lluvia y viento, se concentren en el extremo norte peninsular. En Andalucía será el extremo oriental el que se lleve la peor parte durante la tarde del sábado. Para entonces el viento soplará con fuerza en los sistemas montañosos orientales de las provincias de Jaén y Granada, con rachas que podrán alcanzar los 90 km/h. También el litoral granadino y almeriense sufrirá viento moderado de poniente, que dejará mala mar con oleaje de entre 3 y 4 metros y ante el que la Agencia Estatal de Meteorología ha activado aviso de nivel naranja.
En el resto de la región las espesas y persistentes nieblas matinales que aún se formarán en áreas de valle durante la mañana del viernes, dejarán paso de nuevo a la lluvia que caiga durante buena parte de la jornada del sábado. Precipitaciones en todo caso muy débiles, de las que no se esperan acumulados de consideración en ningún punto de la geografía andaluza.
Máximas en moderado descenso
Por su parte las temperaturas experimentarán un brusco descenso durante el fin de semana, que será especialmente acusado en la mitad oriental. Numerosos puntos de las provincias de Málaga, Granada y Almería sufrirán una caída de las máximas cercano a los 8 grados respecto a las que se registren durante la tarde del viernes, cayendo de nuevo hasta el entorno de los 15 grados. Temperaturas similares a las que se registren en la mitad norte de las provincias de Huelva, Sevilla y Córdoba, donde el descenso será de unos cinco grados.
La atmósfera recuperará algo de estabilidad a partir del domingo 31 de enero. Para entonces el centro de la borrasca Justine se situará sobre la vertical italiana, imponiendo aun sobre la Península Ibérica un marcado flujo del noroeste hasta la jornada del martes 2 de febrero. Hasta entonces Andalucía, al igual que el resto de la Península, seguirá la influencia de nubosidad residual que podrá dejar algunas lluvias débiles aisladas en la madrugada del lunes.
El cambio de mes traerá un progresivo aumento de las temperaturas, que volverán a alcanzar valores prácticamente primaverales a mediados de semana. De nuevo se podrán registrar 24 o 25 grados en puntos de la costa mediterránea y el levante almeriense. En el resto del territorio andaluz las máximas escalarán de nuevo hasta el entorno de los 20 grados, con mínimas que seguirán muy alejadas de las heladas de la primera mitad de enero. Además, los bancos de niebla y las brumas matinales volverán a formarse a lo largo del valle del Guadalquivir gracias al flujo de poniente que soplará desde inicios de semana.
La primera gran borrasca de febrero: lluvias generalizadas y desplome de las temperaturas
El gran cambio en el tiempo se producirá a partir del miércoles 3 de febrero. Para entonces la llegada de una nueva borrasca hasta el litoral gallego, derivará en un auténtico temporal de lluvia, nieve y viento en toda la Península Ibérica. A la lluvia le acompañará un moderado descenso de las temperaturas gracias a la masa de aire polar que arrastrará consigo la borrasca, y que devolverá las sensaciones invernales a buena parte del territorio.
En Andalucía los efectos más notables que se esperan a partir del miércoles vendrán de la mano de las precipitaciones, que serían generalizadas en toda la región con acumulados que podrán superar hasta el próximo fin de semana los 30 litros por metro cuadrado. Precipitaciones que podrán ser nieve en cotas medias y altas de la mitad oriental gracias al acusado descenso de las temperaturas en altura que acompañará al paso de la borrasca.
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