Activistas bloquean la entrada a la fábrica de armas de Trubia, en Oviedo, para denunciar el genocidio en Gaza
Un grupo de activistas protagonizó ayer, miércoles, una acción de protesta a la entrada de la fábrica de armas de Trubia, en Oviedo, para denunciar el genocidio de Israel en Gaza. Los manifestantes, que actuaron en calidad de ciudadanos sin alinearse en un movimiento con siglas especificas, pidieron igualmente el cese del bloqueo israelí a la Franja de Gaza y se encadenaron impidiendo el acceso y la salida a las instalaciones de varias decenas de camioneros.
Los manifestantes depusieron su actitud, una hora y media después, con la llegada de varios agentes de la Guardia Civil que procedieron a identificarlos e instaron a unos trabajadores de la fábrica a cortarles las cadenas para facilitar de nuevo el acceso a las instalaciones.
Los activistas portaban pancartas con el lema “El Xenocidiu entama equí” (“El genocidio empieza aquí”) y “ STOP Genocidio” y su acción fue respaldada por una veintena de ciudadanos y ciudadanas que se incorporaron posteriormente convocados a través de las redes sociales.
La identificación
La acción de protesta comenzó a las 10 de la mañana y se prolongó hasta las 11.30 horas; tiempo en el que impidieron la entrada y salida de vehículos. Tras ser alertada la Guardia Civil, varios agentes se trasladaron a la zona para regular el tráfico de la carretera AS-228, aledaña al complejo, e identificaron a los asistentes.
El bloqueo finalizó cuando los agentes solicitaron a unos trabajadores de la fábrica que cortasen las cadenas con una cizalla de la empresa.
“Desde Asturies, exigimos el cese de toda actividad económica y mercantil con Israel y no permitiremos la colaboración de España en el genocidio a Palestina”, explicaron los activistas que recalcaron que se trataba de “una acción de protesta civil”.
El cese del bloqueo israelí
Su acción se une a otras que se han llevado a cabo en Asturias, con manifestaciones, concentraciones y acampadas universitarias como la de los estudiantes de la Universidad de Oviedo en el campus del Milán, donde se posicionaron “en contra de la complicidad de las instituciones españolas en la ocupación y limpieza étnica del pueblo gazatí”.
El bloqueo de la fábrica ocurre el mismo mes que un barco de la Flotilla por la Libertad zarpa hacia Gaza con ayuda humanitaria, además de la Marcha Global desde El Cairo hasta Raffah donde ciudadanos de todo el mundo exigirán el cese del bloqueo israelí en sus fronteras.
Con la acción de protesta de ayer, en Trubia, se quiere denunciar la connivencia de las instituciones europeas y del estado español con el genocidio que Israel está cometiendo sobre el pueblo palestino.
Entre los ejemplos de esta connivencia citan los contratos de venta de armamento o la participación de la Universidad de Oviedo, vulnerando sus propios estatutos, en el Proyecto TICHE de desarrollo de tecnología bélica, en colaboración con una empresa armamentística estatal israelí.
Según los datos que manejan, la cifra de muertos en Gaza supera los 51.000 y más de 14.000 bebés sufren malnutrición en el territorio palestino.
“Las últimas semanas se ha visto cómo más de 3.300 personas han sido asesinadas, un tercio de ellas niñas y niños. Tras casi 20 meses de invasión y ataques indiscriminados, y con más de 50.000 civiles asesinados, en lo que hace ya muchos meses que la ONU calificó de claro genocidio por parte de Israel, la inacción de los estados europeos es una clara muestra de que los intereses económicos valen más que los derechos humanos”, aseguran.
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