Aigüestortes, mar de roca salpicado por lagos

Este hermoso enclave paisajístico está situado en el noroeste de la provincia de Lleida, concretamente entre las comarcas de Pallars Sobirá y la Alta Ribagorça. Se encuentra rodeado de varios municipios y cada uno de ellos nos ofrece una entrada distinta al parque, escogiendo el acceso que más convenga con respecto a la actividad a realizar.

En todo momento contamos con la presencia del agua mientras paseamos por el Parque Nacional. Son muchos los obstáculos naturales que este bien libre ha tenido que superar para así continuar su paso, empleando para ello vertiginosas cascadas y tortuosos meandros que le dieron nombre a esté rincón pirenaico.

Se han contabilizado más de 200 lagos (o estanys) en torno al Parque, la mayoría de ellos de origen glaciar, formando entre todos la mayor concentración de lagos del pirineo. Cada cual tiene su singularidad y ninguno nos dejará indiferente, desde el más profundo Estany Negre de Peguera con unos 70 metros de profundidad hasta el largísimo lago Llong. Contemplaremos varios de ellos mientras realizamos cualquier itinerario y suponen lugares privilegiados donde hacer una pausa para observar todo lo que nos rodea.

El hombre ha aprovechado la presencia del agua para alimentar las centrales hidroeléctricas y contar con recursos energéticos. Por ello, algunos estanys se han visto modificados empleando incluso presas para mantenerlos más llenos. El ejemplo más destacado lo encontramos en la Vall Fosca, concretamente el lago Gento, aquí se aprovecha la energía eléctrica no consumida durante el día y se emplea durante la noche para volver a llenarlo, de esta forma la central hidroeléctrica se asegura el abastecimiento.

Actualmente la dirección del Parque Nacional trabaja con el objetivo de minimizar la presencia dejada por el hombre, intentando hacer desaparecer estos vestigios y creando planes de conservación que contribuyan a su mantenimiento.

El desnivel del Parque oscila entre los 1.200 y los 3.033 metros de altitud del pico Comaloforno situado en el lado occidental y relativamente cercano al embalse de Cavallers. Pese a ser el Comaloforno el más alto, el pico más conocido, y que da la imagen al parque, es Els Encantats que se alza 2.745 metros sobre el nivel del mar. Este pico bicéfalo, que se refleja en el estany de Sant Maurici, ha sido fotografiado para adornar revistas y calendarios que le han hecho dar la vuelta al mundo.

Montardo (2.833 metros). Mirador privilegiado

Este esbelto pico está situado en el noroeste del Parque Nacional. Al llegar a la cumbre obtendremos la respuesta de por qué tanto montañero se anima a coronarla, pues desde ella se disfruta de unas vistas increíbles del macizo de la Madaleta y Aneto, valle de Arán y el entorno de este increíble Parque Nacional.

Normalmente la ascensión se realiza por el valle de Valarties entrando por el pueblo de Arties, pero en esta ocasión optaremos por subir desde la presa de Cavallers en el valle de Boí.

En un principio es necesario plantearse si vamos ha realizar la actividad en una o dos jornadas, para ello consideraremos el estado de forma de cada uno de los excursionistas. En caso necesario se puede pernoctar en el refugio de Ventosa i Calvell situado a unos 2.200 metros de altitud y en compañía del Estany Negre de Boí.

Daremos comienzo a la actividad en la presa de Cavallers, lugar donde encontramos un amplio aparcamiento. La llegada al refugio se hace placidamente, dando los primeros pasos por el lado derecho de la presa de Cavallers por un terreno llano. En aproximadamente media hora dejamos atrás este primer lago y poco después tras cruzar un puente de madera llegamos al barranco de Llastres. Zigzaguearemos por un sendero que en cada paso se hace más exigente y en ocasiones incluso cruza el río. En todo momento estamreos acompañados por los picos Besiberris y Comaloforno.

En dos horas y media aproximadamente desde el inicio daremos con el bonito refugio de Ventosa i Calvell. Aquí hay una fuente que invita a apagar la sed y nos da la posibilidad de reponer nuestras cantimploras, admirando un paisaje de alta montaña que está adornado por el Estany Negre y pinos con forma espiral.

Continuamos nuestra ascensión por un sendero que se dirige al norte y deja a nuestro lado derecho las Agujas y el Estany de Travessani. Por el momento caminaremos sin elevados desniveles, pisando un terreno cubierto de hierba que atenúa cada paso hasta llegar al Estany des Monges, que rodearemos por su lado derecho para poder continuar.

Tras pasar el lago divisamos nuestro objetivo tapado por el falso Montardo, que engaña y nos hace creer que es la cumbre. Bajo las faldas de esta montaña, en su lado izquierdo, se encuentra el Coret d´Oelbacrestada, que es el collado por el que se accede desde el valle de Valarties. Sin embargo y para iniciar el último repecho, ascenderemos por el lado contrario de este collado caminando por una pedrera que dificulta los primeros pasos. Desde aquí hasta la cumbre el recorrido es evidente, aunque por el contrario se trata del tramo más duro.

Subenuix (2.949 metros). Frontera imaginaria

El pico de Subenuix lo encontramos al sur del Parque. Es un pico al que apenas le faltan medio centenar de metros para alcanzar la prestigiosa cifra que lo incluiría dentro del selecto grupo de los tresmiles, aunque bien merece una visita si queremos disfrutar de una extensa panorámica y coronar una montaña menos frecuentada.

Arrancaremos desde el embalse de Sallente y andaremos mayormente por la zona periférica del Parque Nacional. Debemos decidir si subimos caminando o por el teleférico hasta Estany Gento. Completar la excursión en un día puede resultar duro, así que consideraremos el estado de forma de los senderistas y barajaremos la posibilidad de coronar el Subenuix en dos jornadas, para ello contamos con el refugio Colomina al que llegaremos sin problemas siguiendo las indicaciones.

Una vez en el refugio seguiremos la vía hasta llegar al lago Tort, rodeándolo por un sendero que comparte subidas y bajadas. Después iniciamos un descenso entre enormes bloques, donde encontramos un vivac bajo una de estas enormes piedras. Pasamos sobre un pequeño muro que separa el Estany Mariolo del Tort para continuar hasta el lago Cubieso. Tras pasar un estrecho puente y seguir por un terreno aparentemente llano nos ponemos bajo el pico en compañía del Estany Castieso. Desde aquí la ascensión cambia tajantemente y se hace bastante más dura. Subimos al Collado dels Gavatxos y una vez en el coronaremos el Subenuix tras superar la cada vez más afilada arista que encontramos a nuestra derecha.

Entorno del río Sant Nicolau y Aigüestortes

Se trata de un recorrido sin demasiadas complicaciones y con multitud de variantes. Desde aquí podemos subir a cuantiosos picos que circundan el entorno o visitar los diferentes lagos que abastecen el río Sant Nicolau.

Esta entrada del Parque Nacional la encontramos de camino a Caldes de Boí. Una barrera impide el paso de vehículos, salvo a los taxis que están autorizados para circular con turistas que no quieren sufrir demasiado para visitar Aigüestortes. Este es el punto negativo de esta actividad, pues en ocasiones compartimos algún tramo con el tráfico de coches.

Tras caminar casi una hora somos sorprendidos por la ermita de Sant Nicolau y tras un descenso el paisaje se abre, y nos da la bienvenida el Estany Llebreta. Continuamos y dejamos a nuestra derecha la llamativa cascada de Sant Esperit hasta llegar al punto de información donde acaba el recorrido de los taxis.

Seguimos nuestra caminata por un llano que facilita la formación de los meandros de Aigüestortes, son pocas las subidas y en breve caminaremos por pasarelas de madera construidas para contribuir al mantenimiento de terreno. Abandonamos el Prat d´Aiguadassi y el refugio Llong nos da la bienvenida tras un ascenso entre enormes pinos, desde aquí hasta el lago que le da nombre al refugio no hay perdida.

Otra alternativa es subir al Estany de Contraix superando un desnivel de unos 500 metros. Subir a este estany es más duro que visitar el Estany Llong, por lo que consideraremos el estado de nuestras piernas para continuar nuestra colección personal de lagos.