Los agricultores piden indemnizaciones ante el boicot ruso de productos
El veto de productos de la Unión Europea en Rusia está causando que las frutas y productos de temporada se vendan a precios bajísimos en vista de la gran cantidad de producto. El no vender a Rusia obliga a los productores a buscar salidas para sus productos, en un mercado incapaz de absorber toda la producción sin el cliente ruso.
Las empresas aún no tienen una cuantificación de las pérdidas que tendrán fruto de este boicot, si bien la única cifra sabida es la ayuda de la Unión Europea a España de 125 millones de euros destinada a ayudar a los productores así como a sacar producto del mercado para evitar que se hundan los precios. Buscando una cuantificación con una cifra exacta, en el año 2011 las exportaciones de productos de Castilla-La Mancha a Rusia dieron un beneficio de 44 millones de euros. En 2012 y 2013 las cifras fueron estables, incluso ligeramente mayores, cifras que no llegarán ni a la mitad con las ayudas desde Bruselas.
Al ser los 125 millones de ayudas para toda España, aún queda por ver cómo los reparte el Ministerio de Agricultura entre las comunidades y los productores. Como mucho llegarían a Castilla-La Mancha 15 millones de euros de esas ayudas, 20 en el supuesto más alto, siempre suponiendo estimaciones muy optimistas.
Para José Luis González Durán, portavoz de agricultura del PSOE en Castilla-La Mancha, esta ayuda de 125 millones es insuficiente y ridícula y pide a los gobiernos regional y nacional “que pongan dinero encima de la mesa” para paliar la situación dramática que se cierne sobre los productores. “Que pongan en marcha medidas contundentes” para compensar al sector.
“La facturación a Rusia era importante y no tenerla va a hacer mucho daño”, en palabras del portavoz. Las empresas aún tienen que cuantificar el valor de sus contratos con el país para valorar en una cifra concreta las pérdidas que se conllevarán.
Para González la situación creada en Rusia ha sido otro golpe más a la agricultura y ganadería manchegas, que ya estaban en situación muy complicada. Según destacaba, el gobierno regional en esta legislatura ha reducido en un 40% los fondos propios para estos sectores y en un 70% los programas de producción animal y vegetal. “Hay quien está intentando minimizar el problema, pero es muy grave. Que no miren para otro lado”.
Por su parte los productores, que han considerado lamentable la cuantía de las ayudas concedidas hasta ahora, buscan sus 'tretas' para dar salida al producto cosechado o en cosecha actualmente. Algunos buscan abrirse en nuevos mercados como Sudamérica, donde es complicado competir ante los altos costes de distribución y lo barata que es la producción local allí. También se ha detectado intentos de meter fruta y verdura de la Unión Europea en Rusia con etiquetas de producción de Bielorrusia o Macedonia. Buscan etiquetar en otros países para 'esquivar' el veto y poder vender el producto allí.
Este boicot afectará a la agricultura y ganadería por recolectar desde ahora hasta noviembre, afectando ya a los precios de la fruta de temporada. Desde la Unión Europea se tratará de sacar cantidad de producto del mercado para que los precios no se desplomen, algo que, según denuncian agricultores, ya han empezado a aprovechar algunas grandes superficies.