García-Page releva a la cuestionada consejera de Educación
Primer relevo de importancia en el Gobierno de Castilla-La Mancha cuando todavía no se ha cumplido un año desde su constitución. Reyes Estévez, consejera de Educación, Cultura y Deportes y una de las responsables autonómicas más cuestionadas por la oposición, por los sindicatos y por numerosos colectivos, ha sido relevada, con lo que ha estado casi diez meses en el Ejecutivo regional. Un período frenético durante el que se ha convertido en la cabeza visible de un sector nada contento con su gestión y que ha protagonizado las primeras movilizaciones de la era de Emiliano García-Page. La sustituirá en el cargo el exconcejal de Toledo y exdelegado provincial de Educación, Ángel Felpeto.
La reapertura de las escuelas rurales cerradas durante la etapa anterior del Gobierno del PP, el anuncio de ayudas para comedores escolares y la promesa de un calendario de recuperación de derechos en la educación pública fueron las primeras decisiones que Estévez adoptó nada más tomar posesión. Lo hizo abriendo mesas de diálogo con los sindicatos de enseñanza que tomaron forma a partir del pasado mes de septiembre, pero la “esperanza” mostrada por el colectivo docente se desinfló nada más iniciarse el curso escolar.
El nuevo año académico comenzaba con los mismos recortes en plantillas que se hicieron efectivos en septiembre de 2012 bajo la presidencia de María Dolores de Cospedal, y un mes y medio después se anunciaban las primeras movilizaciones de enseñanza. Todos los sindicatos de educación (ANPE, STE, CCOO, CSIF y UGT) comenzaron a protestar contra el mantenimiento de medidas como el recorte de plantillas, amortización de plazas docentes y mantenimiento de ratios de alumnos muy elevadas. En los últimos meses, tanto CCOO como STE llegaron a decir que los “recortes Cospedal” se estaban convirtiendo en los “recortes Page”.
Los desencuentros han sido cada vez más visibles conforme se reunían las sucesivas mesas sectoriales de educación. El objetivo de la consejera era fijar un calendario de recuperación progresivo de derechos que pasaría por la reducción de ratios en Bachilerato y Educación primaria para el curso 2016-2017 y el sucesivo aumento de las plantillas. Un acuerdo de legislatura complementado con la convocatoria de oposiciones de Educación Primaria, que no ha sido posible debido a la férrea oposición sindical, denunciando que la situación actual del profesorado es insostenible.
En una entrevista con eldiarioclm.es, Estévez señaló que no pedía “paciencia resignada” pero avisaba de que “no podemos hacerlo todo el primer año”. Dijo que las peticiones de cese no condicionaban su gestión, con motivo de que tanto el PP como Podemos hubieran solicitado su dimisión en las Cortes regionales, y se mostraba dispuesta a seguir dialogando con los sindicatos para fijar un calendario de acciones para toda la legislatura “en función de las necesidades”.
En paralelo, pese a mostrarse contraria a la LOMCE y a pedir su moratoria, la ya exconsejera reconoció que esta normativa debía aplicarse mientras siguiera vigente. Sin embargo, no fue el caso en cuanto a la realización de la prueba de “reválida” de Sexto de Primaria, que desde el Gobierno regional se han negado a realizar y han recurrido, al igual que otras comunidades autónomas.
Dejando a un lado la educación, tampoco en el ámbito cultural han faltado las críticas. Aspectos de gran importancia como el IV Centenario de la muerte de Miguel de Cervantes están siendo mayoritariamente gestionados por la Consejería de Economía, dentro del departamento de turismo, mientras que en manos de Estévez recayeron otros más controvertidos. Así sucedió con la partida destinada a artes escénicas: en noviembre el Gobierno anunciaba que no había dotación presupuestaria para estos espectáculos. El anuncio formó tal revuelo entre las asociaciones de productores teatrales que en menos de 24 horas Estévez rectificó y mantuvo la dotación.
Pero además, otros sectores culturales se unieron a las críticas. Un ejemplo fueron las últimas celebraciones del Día del Libro, en que los bibliotecarios de la región reprocharon al departamento regional de Cultura que concediera Premios de Excelencia a este sector en vez de aumentar las partidas presupuestarias para bibliotecas públicas.
Fuentes internas de la Consejería de Educación consultadas por eldiarioclm.es han destacado que este relevo era “inevitable” a la luz del malestar generado en los profesores, pero también consideran que Reyes Estévez tenía por delante una tarea difícil teniendo en cuenta que las prioridades del Gobierno regional eran el rescate social, es decir, las partidas destinadas a luchar contra la pobreza, a mejorar las prestaciones por dependencia o a revertir los recortes en sanidad.
Procedente del sector educativo de Guadalajara, Reyes Estévez es doctora en Filología Inglesa por la Universidad de Vigo y Licenciada en Filología Germánica por la Universidad de Santiago de Compostela. Fue delegada provincial de la Consejería de Educación, Ciencia y Cultura en Guadalajara durante dos años del gobierno socialista de José María Barreda. Es profesora de enseñanza secundaria (2009-2011) y profesora de enseñanza secundaria en el IES Ana Mª Matute de Cabanillas del Campo (Guadalajara). También fue Asesora Técnica Docente de Plurilingüismo y Programas de Igualdad en la Delegación Provincial de la Consejería en Guadalajara.
Su sustituto, Ángel Felpeto, Ángel Felpeto (San Juan de Alba, Villalba, en Lugo) tiene 68 años y es profesor jubilado. Fue delegado de Educación en la provincia de Toledo durante el Gobierno de José María Barreda. Después se incorporó al equipo de Emiliano García-Page como vicealcalde y concejal de Cultura entre los años 2007 y 2011. Retirado de la política, Emiliano García-Page dijo de él en 2014 que “si por mi fuera, él estaría donde quisiera”. Doce años antes, en su calidad de secretario general del PSOE toledano, le había pedido que se presentase a la Alcaldía de Toledo pero siempre permaneció en un segundo plano.
