Dos años de pandemia: la contribución de la Universidad de Alcalá a la lucha contra la COVID-19

Se acaban de cumplir dos años del primer caso de COVID-19 detectado en España. Ocurría el 31 de enero de 2020 cuando el Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III confirmaba el contagio: de un turista alemán que pasaba sus vacaciones en La Gomera, en las islas Canarias.

Los científicos de todos los ámbitos se lanzaron entonces a una carrera de obstáculos para saber más acerca del virus y buscar soluciones. En la Universidad de Alcalá (UAH), Sandra García Gallego, investigadora en el Departamento de Química Orgánica y Química Inorgánica nos habla de los distintos proyectos en torno a la COVID-19 cree que “ha sido una oportunidad para darnos cuenta del potencial que tenemos en la universidad para hacer frente a una situación tan compleja, pese a que las circunstancias no han sido las más favorables”.

Repasa la contribución realizada desde el ámbito académico. “La Universidad de Alcalá ha hecho un gran esfuerzo inversor para fomentar la investigación”, por ejemplo, a través de la convocatoria exprés de ayudas para proyectos de investigación relacionados con la COVID-19. También destaca la labor clínica de los sanitarios vinculados a la comunidad universitaria. “Ha sido fundamental”.

La investigadora subraya que “hemos contribuido de forma global”. Eso se refleja en una monografía de reciente publicación por parte de la Editorial de la Universidad de Alcalá que permite conocer “todos los avances que se han aportado desde nuestra universidad, no solo con los proyectos de la universidad sino a través de los testimonios de distintos perfiles sanitarios que son profesores de la UAH e incluso hay un análisis económico y social”.

¿Los gestores políticos han puesto el foco en lo que la Ciencia puede aportar?, preguntamos. “Sí, hemos tenido esa visibilidad. Era muy necesaria y esperamos que sea duradera y que haya financiación que nos sirva para prevenir futuras pandemias o actuar cuando no podamos evitarlas” y asegura que “las estrategias de la UAH han sido acertadas, actuando rápido. Creíamos que podíamos contribuir en la búsqueda de nuevas terapias, estrategias de diagnóstico…”

Fondos europeos para alentar la investigación

La pandemia ha provocado también la llegada de fondos extraordinarios desde Europa. Los conocidos como Next Generation-EU de los que también se beneficiarán los investigadores.

“Lo más relevante seguramente son los proyectos REACT-UE”, explica Sandra García. En este caso, serán tres de las cinco propuestas presentadas por la Universidad de Alcalá, con una financiación global de 3,4 millones de euros por parte de la Comunidad de Madrid a través de fondos europeos.

Se fomentan proyectos de investigación relacionados con la COVID-19. De un lado, uno de los proyectos aborda el tema ‘Covid-19 y diabetes. Estudio integrado del papel de la proteína dipeptidil peptidasa-4 (DPP4) en la infección por SARS-CoV-2’, liderado por la profesora Inés Díaz-Laviada. “El objetivo es hacer un estudio integrado de la relación entre la diabetes y sus tratamientos, y todo ello relacionado con la COVID-19 desde el punto de vista de la farmacología clínica, la fisiopatología, la comunicación molecular o celular y teniendo en cuenta todas las variantes genéticas de COVID-19”.

El segundo proyecto recibe el nombre de ‘Medicina individualizada y traslacional en pacientes con COVID-19 y post COVID: implicaciones diagnósticas, terapéuticas y preventivas. Optimización de la práctica asistencial en Medicina y Ciencias de la Salud en el entorno de pandemia’, liderado por Melchor Álvarez de Mon. “Se trata de un estudio biomédico de los mecanismos patogénicos, inmuno-inflamatorios tanto de la infección aguda de COVID-19,’ como del síndrome post COVID, para mejorar el manejo clínico y terapéutico de los enfermos”.

El tercero de los proyectos, que coordina la propia Sandra García Gallego se denomina ‘Diseño de nuevas estrategias terapéuticas y de diagnóstico frente a COVID-19’. “Somos siete grupos de trabajo y los orientamos hacia estrategias avanzadas en el ámbito preclínico: nanotecnología, o estudios bioclínicos y otros están más avanzados en cuanto a test de diagnóstico (point of care testing que se usan fuera de laboratorio), con estudios más cercanos a implantarse en la sociedad”. En este sentido, detalla, “esperamos tener ciertos productos que se puedan patentar cuando finalice el proyecto y así aproximarse al mercado”.

Algunos de estos proyectos continúan desarrollándose tras los resultados obtenidos, después de que la Universidad de Alcalá lanzase convocatorias exprés de ayudas para la realización de proyectos de Investigación relacionados con COVID-19, tanto en 2020 como en 2021.

“Se trata de conseguir investigación de mayor calidad y aumentar el número de patentes. La idea es transferir los resultados tanto a la comunidad científica como a la sociedad en general”

Por otro se invertirá en infraestructuras “para dar mejor servicio a los investigadores a largo plazo”. Por ejemplo, vinculado al proyecto que aborda la COVID-19 y la diabetes, se instalará una plataforma de secuenciación del genoma del virus en el Centro de Apoyo a la Investigación (CAI) de la UAH, en el área de Medicina y Biología.

Se incorporarán también, ya relacionados con el segundo proyecto, equipamientos de simulación tanto para adultos como para el ámbito materno-infantil con aplicaciones clínicas.

El tercer proyecto incluye el diseño de un laboratorio de caracterización de nanomateriales orientados al ámbito de la Salud que se ubicará en el CAI de Química. “Estudiaremos tanto esos nanomateriales como sus interacciones con entes biológicos, así como sus aplicaciones preclínicas para saber si realmente tienen el efecto deseado en el ámbito sanitario”.

La científica explica que “se trata de conseguir investigación de mayor calidad y aumentar el número de patentes. La idea es transferir los resultados tanto a la comunidad científica como a la sociedad en general. Es una forma de devolver lo que se ha invertido”. Estos proyectos deberán estar ejecutados a 31 de diciembre de 2022.

Un plan de mecenazgo en marcha

Durante esta pandemia, la Universidad alcalaína ha puesto en marcha un Plan de Mecenazgo, “de cara a que la sociedad pueda involucrarse. Tenemos muchos proyectos que necesitan financiación. Es una buena oportunidad”.

La colaboración incluye deducciones fiscales tanto en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas como en el Impuesto de Sociedades, entre otras cuestiones. 

(*) Proyectos REACT financiados por la Comunidad de Madrid y la Unión Europea, a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), como parte de la respuesta de la Unión a la pandemia de COVID-19