Los cien días de García-Page: “Las prioridades están claras: empleo, educación y sanidad”
El discurso del nuevo presidente de la Junta de Comunidades está lleno de esperanza y así lo dice él mismo. “Hemos afrontado los cien días con mucha esperanza”. Emiliano García-Page habla de su vocación para hacerse cargo de todo lo que ocurre con la región, incluso cuando las competencias se le escapan porque entra dentro de su “convicción personal”. Llevan tres meses, pero la sensación es de “llevar un año, dos o tres”, no sólo para él, sino para todo el Gobierno que lo acompaña. Y, además, está confiado, seguro, de que cumplirá con su programa electoral. “Tenemos esta serena convicción”, ha señalado el político.
Lo más difícil de su Gobierno, asegura García-Page, es enfrentarse a la expectativa social “muy alta” y la ansiedad por que las cosas cambien “cuanto antes”. Pero ese es también el eje, asegura, que seguirá durante la legislatura, de tirar para adelante y salir del “atolladero”. “Hemos quemado etapas muy rápidas como Gobierno y no hemos tenido tiempo para celebrarlo ni respirar. Muchas cosas no podían esperar en la Comunidad Autónoma”. Para cumplir con sus compromisos, el socialista asegura que lo principal es plantear un Gobierno accesible, que prescinda del “sectarismo”.
Pero, además, García-Page quiere dejar las cosas claras con Podemos. “Somos un Gobierno monocolor y vamos aplicar el programa del PSOE”. Además, aseguran que pueden llegar a aplicar medidas del PP si llegan a considerarlas “necesarias” para la formulación de soluciones. Por supuesto, el presidente del Ejecutivo castellano-manchego no quiere dejar de presumir de su “intensísima actividad”, asegurando que han abierto la puerta a todos los colectivos con una agenda abierta y un “compromiso muy claro” con la gente de la tierra. “Nuestro Gobierno es cercano, accesible y permeable. Vamos a medir nuestro éxito con este criterio”, aseguró García-Page.
El socialista ha querido hacer gala de la transparencia de su equipo de Gobierno asegurando que todos han hecho su declaración de bienes, y denunciando que más de medio centenar de altos cargos del equipo de María Dolores de Cospedal se negaron a cumplir con su obligación legal de declarar su renta o patrimonio. “Hemos comenzado a dar muestras de una nueva política con transparencia y honestidad”, aseguraba el líder regional. En relación a la falta de información del anterior Ejecutivo, ha asegurado que se ven “obligados” a tomar decisiones para que se sepa “quienes han movido si dinero público en los últimos años”. “No podemos permitirnos ni un milímetro de sectarismo político”, ha afirmado, mientras remarcaba que todos los miembros de Gobierno tienen su domicilio fiscal en Castilla-La Mancha.
En relación al estado actual de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page no ha querido “mentir”. Ha admitido, entre otras cosas, que la región no está en su mejor situación. “Se ha separado la grieta entre nuestra situación y la de la media”, señala el presidente regional. Entre otras cosas, la pérdida de dinero viene de subvenciones “mal planteadas” que han hecho que se pierda subvenciones europeas o “millonadas” en indemnizaciones por haber “hecho mal las cosas”. Pero el socialista es firme al señalar que no pierde la esperanza, debido al compromiso de su equipo que “no tiene límites”.
El empleo y los servicios sociales básicos siguen como una parte importantísima de su discurso. De hecho Page señala que no sólo es la falta de empleo, sino también su precarización. Por eso, ha señalado que ya en noviembre para que los Ayuntamientos puedan empezar a plantear sus proyectos e iniciar los procesos de contratación. Además, los decretos más importantes del Plan Regional de Empleo estarán listos “lo antes posible”. En esta misma línea, dentro de los servicios sociales, la Oficina Antidesahucios regional estará disponible a partir del 21 de octubre. “Estamos yendo a contrarreloj porque entendemos que es un problema de tipo social que no puede esperar más”. Por otro lado, la región también pretende instaurar ayudas de cara a la pobreza energética. A Page le preocupa que haya familias en la situación de la “posguerra”.
Además, se suprimirán también diez tasas que afectan de forma “inmoral” a los dependientes. El socialista señala que dichos impuestos no sólo no son importantes a nivel económicos, sino que significan, además, un “enorme” trastorno en los valores morales que hay detrás de cobrar este tipo de tasas. Su Gobierno revisará también la tasa de discapacidad, porque resulta “muy llamativo e innecesario”. Dentro de esta misma línea se “sacarán del cajón” los expedientes en dependencia, como parte de la voluntad social de atender a la gente en “función de sus necesidades”.
A pesar de los problemas, García-Page está satisfecho. “Notamos en la experiencia de los primeros cien días que hay muchas posibilidades de que la región se vuelva a poner en pie”. Ante esto, ha señalado que los presupuestos se aprobarán en 2016, ya que “no nos vamos a inventar un 30% del presupuesto”. Además, el Ejecutivo pretende “reordenar” sus prioridades para poder incrementar la capacidad “definitiva” de la región. Y también tiene un mensaje para María Dolores de Cospedal: “Le pido que aguante cuatro años como oposición. Es lo mínimo exigible, porque es el papel que le han adjudicado los ciudadanos”. Al igual que otros socialistas a lo largo de la región ha lamentado que el PP no le diese “ni cien horas” para hacer llegar sus críticas.