Presentan dos nuevos recursos de paralización de las obras del nuevo hospital de Toledo
El Taller de Arquitectura Sánchez-Horneros, encargados de la construcción del nuevo hospital de Toledo hasta la paralización del proyecto ejecutada por el Gobierno regional cuando accedió al poder, ha presentado recursos ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha y la Audiencia Provincial de Toledo por los que solicita de nuevo su indemnización por la decisión unilateral de paralizar las obras que realizó el ejecutivo del PP.
Por un lado presenta recurso contencioso-administrativo a la resolución del Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales dependiente del Ministerio de Hacienda ante el tribunal superior de la región y por otro lado una apelación por una sentencia de un juzgado de Toledo contra la empresa pública Gicaman por la resolución de contrato de la construcción de dicha obra.
Entre sus peticiones, el Taller de Arquitectos señala 3 millones de euros por el incumplimiento, según entienden los arquitectos, del contrato con la Junta de Comunidades en la rescisión unilateral de contrato que realizó el gobierno de Cospedal al paralizar y suspender la obra cuando llegó al poder.
De nuevo solicitan la paralización de la ejecución de nuevo del proyecto y de las obras para proteger los intereses que se pudieran derivar de la sentencia, permitiendo solo las obras necesarias para mantener la actual estructura habilitada para poderse usar posteriormente a la finalización de la obra.
Además se piden los daños y perjuicios que ha traído a la sociedad esta decisión unilateral de la Junta al entender que el bloqueo del proyecto inicial no se ajustaba al derecho existente. De momento las sentencias judiciales han fallado en contra del Taller de Arquitectos y no han admitido sus peticiones, a pesar de que la obra fue detenida y el contrato con el taller extinguido sin asumir la Junta ninguna carga a pesar de estar contemplada una cantidad de dinero como indemnización en caso de no elaborarse el proyecto.
De nuevo el Taller de Arquitectura Sánchez-Horneros, tras tres años y medio de obras paradas, ha pedido a la Junta que no les culpen del bloqueo de las obras que es responsabilidad única de la administración regional. Para los miembros de la empresa, la Junta ha actuado contra ellos de mala fe y solo se dedican a defender sus intereses legítimamente.
También han señalado que no será el único recurso que se interponga a la nueva licitación del proyecto que ha llevado a cabo la Junta, ya que consideran que sus derechos han quedado desprotegidos en numerosas áreas del nuevo proyecto.
