Los sindicatos, esperanzados pero vigilantes
El secretario general de Comisiones Obreras, José Luis gil ha repetido su valoración de la firma del acuerdo entre PSOE y Podemos, al afirmar que el nuevo Gobierno socialista de Castilla-La Mancha “no tendrá ni un día de cortesía”. Así lo anunció el sindicalista tras el fin de la primera sesión del Debate de Investidura y la intervención de Emiliano García-Page.
La falta de los días de cortesía se debe, apuntó Gil, al “sufrimiento en la región”, que obliga al nuevo Gobierno a tener que trabajar para “arreglar el destrozo” de la última legislatura del Partido Popular. Sin embargo, el representante de Comisiones Obreras se ha mostrado también confiado en que el trabajo entre su organización y el PSOE será posible y que García-Page tendrá una “oferta de entendimiento” encima de la mesa, desde el momento en que tome posesión.
Además, Gil ha agradecido que el discurso del socialista haya mencionado tres de los requerimientos del sindicato, como son el plan de choque para el empleo que ayude a los núcleos familiares sin ningún ingreso, la apertura de comedores escolares en verano y la atención a los dependientes en la región. Por otra parte, el sindicalista también ha celebrado que se mencione el conflicto de la empresa Elcogas, en Puertollano, y la intención de ponerse en contacto con José Manuel Soria, Ministro de Indurstria, para abordar la situación.
Por su parte, el secretario general de UGT, Carlos Pedrosa, ha señalado que acepta “el guante” que ha lanzado el candidato socialista, al pedir la colaboración de los sindicatos y ha asegurado que su organización también garantizará la colaboración con el nuevo Ejecutivo. Por otro lado, Pedrosa ha urgido a formar Gobierno “cuanto antes”, ya que la región necesita un Ejecutivo “para poder hablar de los problemas que existen”. De este modo, el sindicalista avisa que habrá “condicionantes” para el trabajo del nuevo Gobierno, como el estado de las cuentas regionales, “que no se sabe cómo van a estar”.