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El Consell calcula que con el freno a los planes urbanisticos se ha preservado el suelo equivalente al 10% de la Comunitat

Imagen de l'Horta de València

Carlos Navarro Castelló

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La consellera de Vertebración del Territorio, María José Salvador, ha hecho balance este lunes de las medidas aplicadas en urbanismo desde 2015 y ha asegurado que la Generalitat “ha cumplido con todos los objetivos en materia de urbanismo marcados al inicio de la legislatura” con la aprobación de instrumentos y planes como el Plan del Litoral (Pativel), el Plan de prevención de inundaciones (Patricova), el Plan de protección de l'Horta, la modificación de la Ley de Urbanismo (Lotup) o el inicio de la tramitación de planes territoriales metropolitanos de València, Alacant-Elx o Castelló y los de la Vega Baja y las comarcas centrales.

En este sentido, ha añadido que “todos estos instrumentos eran necesarios para el nuevo urbanismo sostenible que hemos impulsado esta legislatura y que ha permitido adaptar nuestro territorio a los requerimientos del nuevo modelo económico y social”.

De hecho, ha asegurado que con los planes aprobados que conservan activamente el territorio y con las reclasificaciones que se han evitado “se ha preservado y actuado en una superficie equivalente al 10% de la Comunitat”.

Así, lo ha explicado en un encuentro con los medios de comunicación en el que también estaban el secretario autonómico, Lluís Ferrando, la directora general de Urbanismo, Rosa Pardo, y el director del Institut Cartogràfic Valencià (ICV), Xavier Navarro, donde han presentado el visor cartográfico en el que se recogen los datos presentados sobre el territorio.

En este sentido, la consellera ha recordado que en 2015 la situación era “insostenible” después de 20 años de “urbanismo depredador y poco respetuoso con el territorio”. De hecho, ha apuntado que “los planes aprobados para la clasificación de suelo urbanizable superaban en mucho lo que marca la Estrategia Territorial de la Comunitat Valenciana, desde 1995 se habían reclasificado 108 millones de m² al margen de la revisión de los planes generales; la tasa de urbanización en los 10 primeros kilómetros de la costa había sido 3,5 veces superior al crecimiento de la población en esta zona”.

Ordenación territorial racional

Por ello, ha apuntado que era “necesario un cambio que apostara por la ordenación territorial racional y sostenible para acabar con la destrucción y la depredación del territorio”.

Los planes aprobados durante la legislatura como el Pativel y el Plan de l'Horta han permitido “la protección y conservación activa de más de 7.500 hectáreas en el litoral o 10.000 en la huerta y en total hemos desclasificado 3.785 hectáreas de suelo”.

De esta manera, con estos instrumentos impulsados con “diálogo y consenso con el territorio” se ha ayudado a “adaptar el modelo territorial a las demandas y requerimientos de las normativas legales y estrategias por la Unión Europea”. Igualmente, ocurre con el Patricova donde se han identificado 206.250 hectáreas donde no se puede reclasificar.

Además, “en esta legislatura hemos avanzado hacia un nuevo urbanismo más sostenible al evitar la reclasificación de más de 36 millones de m² de suelo no urbanizable a través de las comisiones territoriales de urbanismo al no acreditar la sostenibilidad necesaria o bien por exceso respecto a los índices de crecimiento exigidos en la Estrategia”.

En total, con los planes aprobados que conservan activamente el territorio y con las reclasificaciones que se han evitado “se ha preservado una superficie equivalente al 10% de la Comunitat”.

“En estos tres años y medios hemos dejado atrás el modelo de desorden y el caos urbanístico del anterior gobierno autonómico que nos abocó a la burbuja inmobiliaria”, que, además, ha provocado una “importante hipoteca urbanística a todos los valencianos ya que aprobaron planes sin los correspondientes informes que han sido tumbados por los tribunales y, por ello, ahora los promotores reclaman a la Generalitat más de 1.400 millones de responsabilidad patrimonial”.

Por ello, “hemos puesto en marcha medidas para recuperar el rigor y la seguridad jurídica en el urbanismo, su función pública y transparente, con un territorio más equilibrado, respetuoso con el medio ambiente, diálogo social y participación ciudadana en los procesos de elaboración y aprobación de los planes y proyectos”, ha indicado, antes de añadir que “hemos sentado las bases del futuro para las nuevas generaciones”.

Visor del planeamiento urbanístico

Por su parte, la directora general de Urbanismo, Rosa Pardo, ha explicado que la cartografía delimita los distintos sectores donde se ha evitado la reclasificación y se puede acceder a la información relativa a cada caso. “Esta información no se había recogido hasta ahora y contiene datos útiles para investigadores ya que muestra las tendencias y presiones que sufre el territorio”, ha indicado Pardo.

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