Hosteleros valencianos: “Un cliente quiso denunciar a dos empleadas porque decía que pedirle el pasaporte COVID coartaba su libertad”

“El cliente cuando reservó la mesa por internet activó la opción de que era poseedor del pasaporte COVID. Sin embargo, cuando llegó dijo que no tenía el certificado, pero que tenía una PCR realizada recientemente. Las dos empleadas que le atendieron le dijeron que tal y como establece la normativa aprobada y avalada por los tribunales solo podía acceder con el pasaporte. El cliente se ofendió mucho, dijo que le estaban coartando su libertad y llamó a la Policía Local”.

Así explica D. L. el incidente que tuvo lugar este lunes por la noche en un restaurante ubicado en el Mercado de Colón de València. Según comenta, todos los días padecen situaciones parecidas relacionadas con el pasaporte COVID, pero sin alcanzar la tensión que se vivió en este caso: “El hombre estaba muy nervioso y cuando llegó la Policía los agentes trataron de mediar para calmarle explicándole que las empleadas solo hacían su trabajo, pero el cliente se lo tomó como algo personal e insistía en denunciarlas. Finalmente los agentes se tomaron los datos de las trabajadoras, aunque no levantaron acta, y lograron que el hombre se calmara, hasta que finalmente se fue”.

Tal y como explica el dueño del establecimiento, según las normativa autonómica aprobada y avalada por la justicia, que figura expuesta en un panel a la entrada del local, solo es válido para acceder al interior de los locales el pasaporte COVID, si bien es cierto que se puede obtener teniendo la pauta completa de vacunación, con una PCR realizada el menos en las 72 horas anteriores o habiendo pasado la enfermedad en los últimos seis meses. Sin embargo, una prueba PCR negativa suelta no se admite porque la aplicación móvil de validación no la reconoce.

El incidente de este local no es puntual. Según explica Rafa Ferrando, de la Federación Empresarial de Hostelería de València, los hosteleros deben lidiar a diario con este tipo de situaciones de protesta o de disconformidad con la aplicación del pasaporte COVID: “Pedimos comprensión, el empresario se limita a aplicar una normativa que además cuenta con el aval del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana y del Tribunal Supremo, y aquellos que por el motivo que sea no tengan el pasaporte siempre tienen la opción de estar en las terrazas”.

Como informó elDiario.es, además de las discusiones con aquellos que se niegan a presentar el pasaporte, entre los problemas que más se repiten con los negacionistas destacan aquellos que dejan comentarios críticos con la calidad del establecimiento en redes sociales especializadas, unas observaciones inventadas que solo buscan dañar la imagen del local. También son habituales los que reservan mesas en interior sabiendo que al no poseer el certificado COVID no podrán acceder, con el deterioro económico que implica para el empresario, que pierde la ocupación de esas mesas.

En Castellón, un grupo de negacionistas autodenominado Grupo Acción Burriana-Nules viene amenazando en ambas localidades castellonenses a hosteleros para que no exijan el pasaporte Covid en sus establecimientos como establece la normativa en vigor.

La Policía Local de Nules está investigando estos sucesos que se producen desde la semana pasada y que están amedrentando a los hosteleros al afirmar que la medida autorizada por el propio TSJCV es ilegal. Los hostigadores se plantan en grupos grabando desde el inicio su entrada en el establecimiento y no llevan mascarillas, explican a los responsables de los locales su acción y les amenazan.

Ante estas situaciones, el presidente del Gobierno valenciano, Ximo Puig, garantizó en una reunión con el sector hostelero y de ocio celebrada la semana pasada todo el apoyo de la Generalitat para hacer cumplir la exigencia del pasaporte COVID. En este sentido, ha avanzado que se ha abierto la posibilidad de colaborar con la Fiscalía ante coacciones y amenazas procedentes de personas o grupos negacionistas.