Seguros de salud para gatos y perros: cómo funcionan y en qué casos compensan sus coberturas
Tenemos la suerte de vivir en un país donde un sistema cuida de nuestra salud y la de nuestras familias, pero cuando nuestros perros, gatos u otros animales con los que convivimos se ponen enfermos, la factura del veterinario puede representar un desembolso importante. Del mismo modo que contratamos un seguro de accidentes para la casa o el automóvil, o un seguro de salud privado, también es posible tener un seguro de salud para nuestras mascotas.
La popularidad de los seguros de salud para mascotas ha aumentado, entre otros factores, debido a la entrada en vigor de la Ley de Bienestar Animal que, a partir del 29 de septiembre de 2024, obligará a todos los dueños de perros a contratar un seguro de responsabilidad civil. La ley anterior obligaba a contratar un seguro solo para los perros de razas consideradas potencialmente peligrosas, como el pit bull terrier o rottweiler, pero ahora serán todos los perros sin excepción.
Estos cambios en la ley también han generado un aumento en la demanda de seguros específicos para animales, no solo por cumplimiento legal sino también por la búsqueda de mayor protección ante gastos imprevistos y accidentes.
Los seguros para mascotas ofrecen diversas coberturas, que van desde la responsabilidad civil hasta la asistencia veterinaria completa. Por ejemplo, compañías como Mapfre, SantéVet o Petplan ofrecen diferentes niveles de protección que pueden incluir desde daños por accidentes y robos, hasta reembolsos por gastos veterinarios y asistencia médica.
Los precios varían según la cobertura y la compañía. Por ejemplo, un seguro básico puede costar alrededor de 60 o 70 euros al año, mientras que uno más completo con cobertura veterinaria puede alcanzar más de 300 euros al año. Además, algunos seguros incluyen beneficios adicionales como la libre elección de veterinarios y la posibilidad de coberturas internacionales.
Coberturas del seguro para mascotas
A la hora de contratar un seguro de salud para mascotas, como cualquier otro seguro, es conveniente valorar qué coberturas necesitamos y sopesar los posibles riesgos. Estas son algunas de las coberturas más recomendadas:
- Responsabilidad civil: cubre los daños que la mascota pueda causar a terceros, tanto materiales como personales. Será obligatorio en España desde 2024 para todos los perros, pero no para otras mascotas. Ya está en vigor en algunas regiones como Madrid y el País Vasco, con una cobertura que no puede ser inferior a 120.000 euros.
- Cobertura veterinaria: en general debe incluir visitas al veterinario, tratamientos médicos y cirugías.
- Hospitalización: cubre los gastos de hospitalización si la mascota necesita quedarse en una clínica.
- Medicamentos: reembolso del coste de los medicamentos recetados por el veterinario.
- Accidentes: cubre los gastos veterinarios derivados de accidentes, como atropellos o caídas. Algunas pólizas pueden cubrir más de 3.000 euros anuales.
- Enfermedades: incluye el diagnóstico y tratamiento de enfermedades de las mascotas, pero suelen tener un límite de gastos que puede variar según la póliza.
- Vacunas y desparasitaciones: algunas pólizas incluyen tratamientos preventivos como vacunas y desparasitaciones de los animales.
- Revisiones regulares: en este caso quedan cubiertas las consultas de rutina y chequeos de salud periódicos de la mascota.
- Indemnización por muerte: en caso de fallecimiento del animal debido a accidente o enfermedad, algunas pólizas ofrecen una indemnización.
- Robo y pérdida: esta cobertura compensa en caso de robo de la mascota o gastos relacionados con la búsqueda de una mascota perdida.
- Sacrificio y eliminación del cadáver: cubre los gastos relacionados con el sacrificio y la eliminación del cuerpo de la mascota.
- Asistencia telefónica: determinadas pólizas incluyen asesoramiento veterinario telefónico las 24 horas.
- Cobertura internacional: protección para mascotas y responsabilidad civil durante viajes al extranjero.
- Descuentos en clínicas concertadas: algunos seguros ofrecen tarifas reducidas en una red de clínicas veterinarias concertadas.
- Veterinario a domicilio: esta cobertura nos ahorrará desplazarnos a la consulta del veterinario cuando no sea posible.
Muchas de estas pólizas tienen limitaciones. Por ejemplo, determinadas pruebas o tratamientos, como las ecografías, análisis de sangre o sacrificio, pueden estar parcialmente cubiertas, y serán los dueños quienes tengan que aportar la diferencia de precio del servicio. A cambio, se puede reducir el precio anual del seguro.
Qué hay que tener en cuenta para contratar un seguro de mascotas
Al contratar un seguro para perros, gatos y otras mascotas, es importante considerar las necesidades y los riesgos concretos para cada animal.
- Cuantía de la responsabilidad civil: asegúrate de que la póliza tenga una cobertura lo más generosa posible, por encima del mínimo marcado por la ley.
- Límites anuales: las coberturas pueden estar limitadas en gastos, por ejemplo, hasta un máximo de 3.000 euros al año, como en número de tratamientos. Ten en cuenta que por encima del límite tendrás que correr con el costo completo.
- Franquicias: si la póliza tiene una franquicia, puede que en caso de accidente tengas que pagar una parte de tu bolsillo. A cambio, tendrás una prima anual menor.
- Enfermedades preexistentes: asegúrate de saber si el seguro cubre enfermedades preexistentes o si estas están excluidas para evitar sorpresas.
- Periodos de carencia: como ocurre con los seguros de salud de las personas, puede que la compañía de seguros obligue a esperar un tiempo antes de comenzar a cubrir ciertos servicios como la hospitalización.
- Elección de veterinario: verifica si puedes elegir libremente a tu veterinario o si estás limitado a una red de clínicas concertadas.
- Cobertura internacional: si viajas con tu mascota al extranjero, considera una póliza que ofrezca cobertura internacional, tanto de responsabilidad civil como de gastos veterinarios.
- Aumento por siniestralidad: asegúrate de entender si el precio del seguro aumentará debido a siniestros previos.
Tomarte el tiempo para comparar diferentes pólizas y aseguradoras te ayudará a encontrar el seguro que mejor se adapte a tus necesidades y las de tu mascota.
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