Centro Cultural de España abre muestra de pintor panameño sobre Casco Antiguo

El Centro Cultural de España en Panamá Casa del Soldado (CCE/CdS) acoge desde hoy una exposición del artista panameño Manuel Sacramento, un “vitalista” que ni siquiera convaleciente en un hospital dejó de trabajar en esta muestra que proyecta su visión y fantasías del Casco Antiguo de la capital.

Sacramento -conocido como “Chingui”, una especie de outsider o forastero desconocido en los circuitos formales y oficiales del arte- reúne en esta muestra unos 40 de sus trabajos sobre el centro histórico de Ciudad de Panamá, donde reside desde el año 2000.

Entre las piezas, que exhibirá en el Centro Cultural hasta el 3 de febrero, hay elaboradas con lapiceros de tinta negra sobre papel, pinturas sobre soportes duros y un mural.

El comisario de esta muestra, el guatemalteco Emiliano Valdés, señala que en ella se intenta dar a conocer una visión del Casco que se aleja de la turística, y que rescata la experiencia de Chingui como “uno de los residentes históricos de un área que ahora parece estar reservada para los más privilegiados”.

Valdés dijo a Efe que esta es la primera vez que a nivel institucional se exhibe la obra de Sacramento, en el marco del proyecto “En una papa” que la artista Pilar Moreno gestiona con el CCE/CdS “para dar visibilidad a los artistas que trabajan en los márgenes del circuito artístico y en algunos casos de la sociedad”.

El nombre del proyecto, según señaló Moreno, está inspirado en la obra de Sacramento, “que sitúa, en el mundo fantástico de sus cuadros, a muchos de sus personajes viviendo ”en una papa“ (Un osito dentro de una papa, Un elefante en pijama durmiendo en una papa...).”

“Creo que es una exposición excepcional, pues es un reconocimiento a un artista que ha estado trabajando por mucho tiempo en el medio artístico, pero que no en todos los casos se le ha dado todo el reconocimiento que se merece”, afirmó Valdés,

Manuel Sacramento es un artista autodidacta y una especie de outsider, en vía contraria a los profesionales y reconocidos por los circuitos habituales del arte, resaltó Valdés.

Recordó que Sacramento ya tuvo otras dos exposiciones en bares restaurantes del Casco Antiguo, pero reiteró que esta muestra en el Centro Cultural es la primera a nivel institucional “seria” y en la cual trabajó intensamente de la mano de un curador.

Incluso, de acuerdo con Valdés, en una convalecencia reciente por una fractura en una de sus piernas, Sacramento no dejó de trabajar para esta exposición, realizando dibujos “de memoria” sobre las calles y caserones del Casco, así como también del mural que completa la muestra.

“Chingui es un gran observador, y a mí me interesaba su línea de trabajo sobre los caserones y la arquitectura del Casco Antiguo que a mí me interesaba muchísimo, porque creo que el centro histórico de Ciudad de Panamá ha cambiado muy radicalmente en los últimos diez años”, expresó.

Agregó que todos estos cambios son realmente muy dramáticos y no han sido documentados, por lo que el trabajo de Chingui, que tiene más de 60 años de edad, “es justamente el de registrar la manera que ha cambiado el Casco a través de este proceso de gentrificación (transformación de un espacio urbano deteriorado)”.

Explicó que además de distinguirse por su espontaneidad, en la obra de Sacramento “los personajes fantásticos, y la fantasía en general, juegan un papel muy importante que se hacen presente en una muestra como ésta”.

“Es una obra muy vitalista y muy optimista como es Chingui en general, quien a pesar de unas circunstancias de vida muy difíciles por momentos, es cierto que tiene la capacidad de rescatar la belleza y la esperanza que hay en el arte”, remarcó el comisario de la exposición.