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EA celebrará su congreso repetido con autorización judicial en medio del marasmo de pleitos

Ramírez y Blanco, en los dos extremos, con la magistrada Rodríguez Ruiz al fondo

Iker Rioja Andueza

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Eusko Alkartasuna (EA, partido integrado en EH Bildu) celebrará este fin de semana en Bilbao su congreso con toda la normalidad posible en la grave crisis interna que vive. La juez de Vitoria Cristina Rodríguez Ruiz ha decidido finalmente desestimar la petición del sector crítico de paralizar cautelarmente esta cita, que a su vez es la repetición de la celebrada en Vitoria en febrero y cuyos nombramientos y acuerdos políticos están paralizados temporalmente precisamente por otra impugnación.

Estima la magistrada que los demandantes no han acreditado que se vaya a producir un “un perjuicio de imposible o muy difícil reparación” en en el caso de que, en el futuro, los tribunales vayan resolviendo los numerosos pleitos que jalonan el día a día de EA desde hace años. Solamente este semana ha habido otros dos juicios. Además, tampoco acepta la tesis de que del congreso pueden salir decisiones que afecten a las próximas elecciones, las municipales y forales de mayo de 2023. Los críticos exigen otra correlación de fuerzas dentro de la coalición EH Bildu. “Frente a ello -sigue la magistrada- se opone el derecho de los afiliados al partido político al normal funcionamiento de sus organismos, a la formación del congreso”.

Cabe recurso ante la Audiencia Provincial de Álava contra esta medida. Indica Rodríguez Ruiz que el plazo es de viente días “ábiles” [sic]. Sin embargo, como el cónclave ya se habrá celebrado solamente cabrían medidas como las que llegaron tras la anterior cita, es decir, de paralización de acuerdos ya adoptados. Será el tercer intento de Eva Blanco para estabilizarse en el cargo de secretaria general tras las primarias de 2019 y la designación congresual de febrero. En paralelo, sobre el referente crítico Maiorga Ramírez pesa una sanción disciplinaria que el partido llama “suspensión” y el afectado “expulsión”. Otros dirigentes afines se hallan en la misma situación.

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