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Pradales lanza un plan de choque de 2.150 millones de euros para paliar los efectos de los aranceles

El lehendakari, Imanol Pradales, con los consejeros Torres, Jauregi, D'Anjou y Barredo

Iker Rioja Andueza

Vitoria —

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El lehendakari, Imanol Pradales, ha anunciado un plan de choque de 2.150 millones de euros ante la incertidumbre económica abierta a escala global por la subida de aranceles anunciada desde Estados Unidos por Donald Trump. Sería el equivalente a casi el 15% del presupuesto total de la comunidad autónoma para 2025.

El paquete incluye refuerzos a los ERTE, planes de recolocación y formación de empleados que puedan verse afectados, apoyo al primer sector o líneas de avales, ha dicho Pradales. “Es un primer paquete de medidas. Si es necesario, podremos ampliarlas en el futuro futuro. Ante la adversidad, debemos responder desde la unión. Los afectados no vais a estar solos”, ha solemnizado Pradales en el parque tecnológico de Miñano, a las afueras de Vitoria, donde ha reunido de forma extraordinaria una suerte de mesa de crisis llamada “grupo para la defensa industrial” y que sienta a varios consejeros de su Gobierno, otros cargos institucionales, empresas y, por vez primera, sindicatos como LAB, CCOO y UGT.

Pradales no ha admitido preguntas de los periodistas en su comparecencia y no se ha podido precisar cuánto de los 2.150 millones es verdaderamente nuevo. De hecho, el lehendakari ha incluido como partida más relevante del paquete 1.000 millones de euros ya anunciados sobradamente en las últimas semanas. Se trata de una línea de endeudamiento adicional con respecto a los 490 millones contemplados en los presupuestos de 2025 y que desde este martes tramita ya el Parlamento Vasco. De hecho, el consejero de Hacienda, Noël d'Anjou, viaja este jueves a Madrid a buscar una flexibilización del límite de deuda aún mayor para sumar más recursos.

Pradales, en tono grave y tras una agenda muy intensa -“¡no sé ni cómo llego a los sitios!”- que le ha llevado en cuestión de horas a Beasain para visitar CAF y a Pamplona para reunirse con el primer lehendakari, Carlos Garaikoetxea, ha pedido no caer en “alarmismo” pero sí actuar con firmeza. Europa debería agotar las vías diplomáticas pero también hay que preparar soluciones de contingencia. De hecho, ha comparado el plan con las medidas anticrisis lanzadas durante la pandemia de la COVID-19 o tras la invasión de Ucrania.

“En Euskadi, estamos preparados”, ha resaltado. También ha indicado que las ayudas vascas serán complementarias y compatibles con las que han anunciado o puedan anunciar tanto Pedro Sánchez como Ursula von der Leyen. Y, sobre todo, ha pedido mirar más allá de Estados Unidos y buscar nuevos mercados en Reino Unido, Canadá, Australia, China, India, Corea del Sur y Japón.

Arropado por el vicelehendakari y cabeza del PSE-EE en el Gobierno de coalición, Mikel Torres, y por los consejeros de Industria, Mikel Jauregi, del primer sector, Amaia Barredo, y por el propio D'Anjou, Pradales ha explicado sus medidas en una comparecencia ante la prensa antes de reunirse con los agentes económicos y sociales. La directora del parque tecnológico, Miren Bilbao, ha ejercido de anfitriona de un encuentro al que igualmente han asistido una sesentena de personas. En concreto, han acudido a Miñano Petronor, Iberdrola, Ingeteam, Arteche, CIE, Gestamp, Aernova, ITP, Tubacex, Sidenor, Mondragon, Mercedes-Benz, CAF, la patronal Confebask, diez clústerses, las tres diputaciones forales, las cámaras de comercio, Elkargi y los sindicatos, LAB, CCOO y UGT. El sindicato ELA ha dado plantón a Pradales.

Según ha desgranado el lehendakari, las medidas tienen tres ejes. El apartado de “protección de las personas y el empleo” tendrá 104,5 millones de euros para “fomento a la contratación con discriminación positiva para aquellas personas en desempleo y/o empresas afectadas”, 100 millones, y complementos para ERTE (2 millones), recualificación y recolocación de sectores afectados (1 millón, 'Aukera berri'), y ayudas específicas para cooperativas (1,5 millones).

El segundo bloque es de 2.000 millones “para defender y transformar el tejido empresarial vasco, especialmente las pequeñas y medianas empresas”. Son 450 millones en avales de Elkargi, 533 millones en ayudas a la industria, 5,5 millones para el primer sector y las bodegas de Rioja Alavesa y una segunda edición de Nekafin (25 millones) a través del Instituto Vasco de Finanzas. El resto son los 1.000 millones ya conocidos. Y el tercer bloque son “ampliaciones de las ayudas dirigidas a la búsqueda de nuevos mercados e internacionalización de las empresas vascas”. Por ejemplo, hay 32 millones para explorar vías en países diferentes. “Mercosur, Asia y África”, ha dicho Pradales.

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