El Ayuntamiento de Mérida reabre el servicio de comedores escolares gratuitos que la Junta cerró a finales a finales de mayo
Nuevos aires en el Ayuntamiento de Mérida. El socialista Antonio Rodríguez Osuna lleva 24 horas al frente del gobierno municipal y ya ha tomados sus primeras decisiones: reabrir los comedores escolares gratuitos que Monago cerró a finales de mayo, y paralizar dos desahucios.
La primera de las medidas beneficiará a cientos de alumnos que se quedaron sin este servicio el pasado 29 de mayo. Desde entonces el presidente el funciones de la Junta, José Antonio Monago, sigue sin dar una solución a los menores que tienen concedida una beca de comedor escolar, tras paralizarse el servicio.
El ayuntamiento emeritense ha tomado la delantera y devolverá la gratuidad del servicio a las familias que designen los servicios sociales. Beneficiará a menores de entre 6 a 14 años, y se prolongará del 22 al 30 de junio. El servicio se prestará en dos centros, uno en Nueva Ciudad y otro en la zona de San Juan y San Lázaro.
La nueva portavoz municipal, Carmen Yáñez, informa de que se espera que la Junta con Vara al frente los reabra durante los meses de julio y en agosto. De este modo, tras el periodo estival, sería en septiembre cuando el ayuntamiento volvería a hacerse cargo nuevamente del servicio.
“Se trata de nuestra primera urgente; no podíamos retrasarla porque es necesario cubrir las necesidades básicas de muchas familias. Es una medida que tomamos reconociendo una situación a la que teníamos que dar respuesta, a la que no podíamos dar la espalda”. El servicio también les ofrecerá actividades deportivas, de hábitos saludables, ocio y educación.
Ayer mismo Mérida Participa, la candidatura avalada por Podemos, había reclamado al nuevo ayuntamiento una solución urgente ante la falta del servicio del comedor escolar. Advertía que cerca de 800 niños y niñas habían dejado de beneficiarse de este servicio, aun cuando el curso escolar no ha finalizado.
Fin de los desahucios
Otras de las medidas que no se ha hecho esperar ha sido la de parar desahucios. Por el momento uno, y un segundo en proceso.
En primer lugar el consistorio ha intervenido en el desahucio de una familia en una vivienda de alquiler que se iba a ejecutar esta misma semana. A la familia también se le resolverá, de urgencia, su solicitud de renta básica.
El propio alcalde ha explicado que el caso les llegó en la mañana del lunes, y que ya se está atendiendo desde la Delegación de Servicios Sociales. Así el ayuntamiento se ha puesto en contacto con los juzgados, los propietarios del inmueble y la administración autonómica. Su objetivo es resolver el problema y dar una alternativa habitacional a la familia.
Además, este mismo miércoles el ayuntamiento se persona ante la Junta para paralizar el desahucio de una vivienda social pública. La concejala responsable de los Servicios Sociales, Mercedes Carmona, ha transmitido a este diario que su objetivo será paralizar todos los desahucios a los que se enfrentan las familias de Mérida.
Lo hará a través de un protocolo de actuación que se pondrá en marcha, y que también trabajará para que las familias no arrastren la mochila de las deudas, en caso de que se queden sin vivienda.
