Cuatro detenidos por incendios forestales intencionados en la provincia de Cáceres

El SEPRONA ha identificado en los últimos meses a los responsables de diecisiete incendios en Cáceres, con cuatro detenciones por fuegos intencionados y seis investigaciones por imprudencia grave. El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Comandancia de Cáceres ha desarrollado estas investigaciones penales combinando trabajo de campo exhaustivo con técnicas especializadas, permitiendo identificar tanto a los autores de los incendios intencionados como a los responsables por negligencia, según una nota de prensa enviada hoy a los medios de comunicación.

Entre los casos más recientes, el 31 de agosto en Valverde del Fresno fue detenida una mujer por la supuesta comisión de dos incendios en zonas próximas a vías de comunicación. Un día antes, en Aldeanueva del Camino, otro hombre fue arrestado por provocar un incendio con dos focos, que apenas afectaron 310 metros cuadrados gracias a la rápida intervención de los servicios de extinción.

En Millanes y Saucedilla, tras varios incendios registrados durante 2024 y 2025 con un patrón idéntico —aplicación directa de fuego en márgenes de camino sobre vegetación seca—, la Guardia Civil detuvo a una mujer como presunta autora de varios fuegos intencionados. Por último, el 6 de agosto en Valdefuentes, el conductor de un vehículo que circulaba por la zona de inicio del fuego fue detenido como presunto responsable de un incendio que afectó a una hectárea de pastos e higueras.

No todos los incendios fueron intencionados. Entre los casos por imprudencia grave se encuentran el de Arroyomolinos de la Vera, donde restos de tala y serrín acumulados en una parcela de frutales facilitaron la propagación del fuego, y el de Valdecañas de Tajo, en el que ramas de un árbol ornamental impactaron contra un tendido eléctrico, desprendiendo material incandescente que provocó un incendio.

Otros fuegos graves incluyeron el de Ceclavín, donde detonaciones de un cañón espantapájaros provocaron llamas que calcinaban pastos; el de Villanueva de la Vera, que obligó a evacuar a 17 personas y calcinó más de 40 hectáreas por un tendido eléctrico mal mantenido; y el de Aldea del Obispo, originado por la quema negligente de residuos domésticos que se propagó por el viento hacia material seco.

Estas actuaciones se suman a otras recientes, como la detención en mayo de un individuo implicado en siete incendios en Casas del Castañar y Cabrero, que permanece en prisión provisional, y la “operación Oldburn” de julio, que permitió arrestar a una mujer por varios incendios en Villamesías.

La Guardia Civil recuerda que los incendios forestales constituyen una grave amenaza para la seguridad de las personas, el medio ambiente y el patrimonio natural, e insiste en la necesidad de extremar la precaución, especialmente durante la temporada de riesgo alto. La combinación de vigilancia, investigación y concienciación sigue siendo clave para evitar tragedias y minimizar el impacto de estos sucesos sobre el territorio.