La Diputación de Cáceres trabaja en un proyecto piloto de viviendas para temporeros en el Jerte
La Diputación de Cáceres trabaja en el diseño de un proyecto piloto para habilitar viviendas destinadas a los temporeros que cada año se desplazan al Valle del Jerte durante la campaña de recogida de la cereza, con el objetivo de mejorar sus condiciones de habitabilidad y dar respuesta a una problemática que se repite cada año.
Así lo ha anunciado la vicepresidenta segunda de Hacienda y Administración General de la institución provincial, Isabel Ruiz, tras mantener una reunión en Valdastillas con el presidente de la Agrupación de Cooperativas del Valle del Jerte, José Antonio Tierno.
Ruiz ha explicado que la preocupación de la Diputación es “dar las mejores condiciones de habitabilidad a todas las personas que cada año se trasladan a esta zona para recolectar la cereza, tan conocida en todo el mundo”.
El proyecto se encuentra en una fase inicial, con los primeros contactos y sondeos para identificar las necesidades más urgentes en los distintos municipios de la comarca. “Queremos poner en marcha un proyecto piloto que pueda estar operativo para la próxima campaña y que sirva de modelo para abordar esta problemática que cada año se repite en el Valle del Jerte”, ha señalado.
La vicepresidenta ha avanzado que la Diputación contactará con los ayuntamientos de la zona “para disponer de terrenos o espacios municipales donde crear zonas habitacionales que cubran las necesidades de alojamiento de los trabajadores temporeros”.
Respecto a la financiación, Isabel Ruiz ha indicado que todavía no se ha concretado una partida presupuestaria, “ya que se está valorando la dimensión del proyecto”. “Estamos analizando las necesidades en toda la zona para poder dotarlo económicamente en los presupuestos de 2026”, ha apuntado.
Por su parte, el presidente de la Agrupación de Cooperativas, José Antonio Tierno, ha destacado la importancia de contar con viviendas adecuadas para garantizar la disponibilidad de mano de obra durante la campaña. “Si no hay vivienda, no hay mano de obra, y necesitamos a esos trabajadores para mantener la producción”, ha defendido.
Tierno ha explicado que la campaña de la cereza es “muy corta e intensa”, y que este año la central cooperativa ha llegado a contar con más de un millar de personas dadas de alta, además de varios centenares de trabajadores procedentes de localidades cercanas y otras zonas de la provincia.
“Actualmente dependemos del alquiler de alojamientos particulares, y esa es nuestra principal limitación. Si tuviéramos más viviendas, vendría más gente a trabajar”, ha asegurado.
También ha subrayado que disponer de una red de viviendas “dignas y legales no solo es necesario para la cereza, sino que podría aprovecharse para otras campañas agrícolas y contribuir a frenar el despoblamiento rural”.
La Diputación prevé mantener en las próximas semanas reuniones con alcaldes y mancomunidades del norte de la provincia para definir el alcance del proyecto y coordinar su desarrollo.
0