Las 'apps', un diamante en bruto: luces y sombras del prometedor mercado español
Más de 22 millones de españoles hacemos uso cada día de, al menos, una aplicación. Ya sea para charlar con nuestros amigos, para llevar un registro de nuestra preparación física o, simplemente, para mantener la mente despierta mientras vamos en el autobús al trabajo, no nos separamos de ellas ni un solo instante. Pero nunca estamos del todo contentos, ni somos fáciles de conquistar. Al día se descargan en España un total de 4 millones de ‘apps’, pero otras tantas se borran y muchas se quedan olvidadas en la memoria de nuestro teléfono o tableta.
El universo de las aplicaciones va ganando terreno en nuestras vidas y, como cada mes de septiembre, los datos que recopila The App Date tratan de demostrárnoslo. Si su informe sobre el estado de las ‘apps’ en España de 2011 nos contaba qué era 'eso' de las aplicaciones, en 2013 el escenario que dibuja es completamente diferente. Ahora todo el mundo conoce a la perfección su significado. Se han colado de forma sigilosa en nuestras vidas para robarnos horas de descanso y no dejarnos solos ni para ir al baño.
Pero... ¿Qué se esconde tras todos estos datos?
Nuestras fieles compañeras de viaje
Desde 2011, España es el país europeo con mayor penetración de ‘smartphones’ y tabletas, aunque a cada uno de estos dispositivos móviles les damos una utilidad diferente. Mientras con nuestro móvil chateamos, revisamos el correo y cotilleamos las redes sociales, somos más propensos a utilizar las ‘tablets’ para estar informados y para hacer más ameno el día a día con todo tipo de pasatiempos.
Sin lugar a dudas, se trata de un escenario con un futuro prometedor. “Hay un mercado incipiente, que crece y madura muy rápido, y hay una oportunidad de generar negocio para desarrolladores, para medios, para personas relacionadas con el marketing, para profesionales, para gente que se forme en el desarrollo de ‘apps’”, nos cuenta Javier Navarro, responsable de The App Date en España. De los 46.704.314 de personas que viven en nuestro país, más de la mitad poseen un teléfono inteligente y hacen uso de algunas de las miles de aplicaciones que pululan por el mercado. De media, según señala el informe, disponemos de 24 aplicaciones en nuestro ‘smartphone’ y 31 en nuestra tableta.
Siempre ávidos, ya son muchos los que están sabiendo aprovechar este enorme potencial para tomar posiciones y empezar a hacer caja. Algunas compañías comienzan a incluir entre sus estrategias de marketing el desarrollo de aplicaciones con las que llegar de forma más directa a sus clientes. Como explica Navarro, hay “marcas tradicionales que van a utilizar las aplicaciones para llegar a los usuarios, pare entablar relación con ellos... Están deseando estar en el bolsillo de los usuarios”. Pero no solo eso: también los desarrolladores independientes pueden hacer negocio en este sector y contribuir a la creación de un ecosistema de emprendimiento, a día de hoy solo incipiente, que resulta de vital importancia para que el mercado de las 'apps' en España consiga realmente despegar.
Pero… ¿es oro todo lo que reluce?
Aunque son muchas las oportunidades que presenta este mercado, la industria de las ‘apps’ en España aún está en pañales. Si comparamos nuestra situación con lo que sucede en potencias como Estados Unidos, donde la inversión y los apoyos a este sector animan a los desarrolladores a seguir innovando, rápidamente entendemos que aún hay mucho trabajo por hacer. “Quitando, como siempre, mercados como el americano, el hecho de montar una ‘app’ como negocio e ir evolucionándola y tratar de tener una buena relación con los primeros cientos de miles de usuarios que la descarguen es todavía una asignatura pendiente. Detectamos que es algo que falta”, afirma Navarro.
No todo consiste en poner en marcha una gran idea. “Es un mercado muy dinámico y exigente. No solo es llegar a conseguir millones de descargas, sino que lo más difícil es quedarte. El 60% de las ‘apps’ que se descargan en el mes uno, en el mes dos ya no están en los terminales de los usuarios. Esa estrategia de marketing promocional con los usuarios que descargaron la aplicación falla”. Así, aunque la iniciativa resulta esencial a la hora de emprender el desarrollo de una 'app', si los desarrolladores no cuentan con una estrategia a medio y largo plazo su trabajo acabará en el trastero de los dispositivos móviles de los usuarios. Para eso hacen falta recursos y modelos de negocio. Alternativas como la financiación por parte de las marcas ya se están poniendo en marcha, pero también es necesario que se pongan las bases de un ecosistema de emprendimiento capaz de apostar por este prometedor mercado.
Lo cierto es que, aunque son muchas la posibilidades, no todas las formas de obtener financiación son igual de efectivas para mantener una actualización constante de las aplicaciones. “Hay una verdad que no está en el estudio, como es el hecho de que cada vez hay más ‘apps’ que son gratis o que el precio de las mismas cada vez es menor. El 70% de las aplicaciones que hay en el mercado son gratuitas”, afirma Javier Navarro.
Una de las consecuencias directas de esta carencia es el perfil de las aplicaciones españolas más descargadas en iOS y Android. ‘Go! Chat for Facebook’, ‘iBasket’, ‘LogosQuiz’, ‘Tu peso ideal’ o ‘El test de la vida’ copan desde 2011 los primeros puestos del ranking de las ‘apps’ creadas en España que más tirón tienen en el mundo. No solo son siempre las mismas, lo que denota cierto grado de estancamiento, sino que además se trata de productos sencillos, de bajo coste y poco sofisticados. No tenemos un WhatsApp, un Candy Crush, un Angry Birds o un Instagram.
Así, aunque “a día de hoy triunfan las aplicaciones de juegos o que te hacen sonreír y las apps que son útiles”, como asegura Navarro, lo cierto es que las ‘apps low cost’ españolas poco pueden hacer para asaltar los primeros puestos de las listas de descargas de Google Play o de la AppStore.
Revertir la situación y aspirar al sueño americano no va a ser tarea fácil. “Estamos en España, las cosas cuestan más, pero grandes apps como WhatsApp o Instagram empezaron como aquí Go! Chat for Facebook. Pero era otro mercado donde la financiación es más fácil, conseguir inversores es más fácil… Aquí cuesta más. Allí el ecosistema de emprendimiento de inversores es mejor, el nuestro está a años luz”.
Lo importante, tal vez, es ir pasito a pasito. Lo primero es que los propios desarrolladores cambien su concepción del mercado y comiencen a perseguir la innovación, sin dejar nunca de lado al usuario y sus demandas de actualización constante. Lo segundo, si cabe aún más esencial, es que comience a llegárles el dinero: que el capital riesgo apueste por las 'apps' y la legislación no se encargue de disuadir tanto al inversor como al empresario. Si conseguimos avanzar en esto, lo demás será coser y cantar y seguro que, dentro de unos años, informes como el de The App Date son un fiel reflejo de una nueva Marca España. Si no, seguiremos a rebufo de las auténticas economías digitales.