El Clavijo decide mal y sigue en el barro
Hay decisiones que marcan. Jenaro Díaz se la jugó a defender. A tenor del resultado, no hizo bien su apuesta. Restaban 18 segundos y Bieshaar venía de empatar a 73 después de que Antonio Pérez decidiera hacer falta personal y tener su equipo la oportunidad de ganar. La idea era que el tiempo pasara y en los últimos instantes dar el balón a Dee o Wintering, grandes amenazas de los vitorianos. Se había hecho bien y parecía que la idea escogida iba a dar sus frutos, pero Edwards no miró a canasta, prefirió buscar a un compañero. Se la dio a Wintering y el triunfo se marchó a tierras alavesas después del triple sobre la bocina del estadounidense. No sólo eso, la derrota condena al Clavijo a unas dos jornadas finales de infarto para salvar la categoría.
Todo porque ante Araberri no se vio la mejor versión del bloque riojano. Es como si la derrota frente a Breogán hubiera generado dudas. No debía ser así, pero el líder de LEB Oro enseñó el camino, que los logroñeses no fueron los amos del rebote defensivo. Por ahí fue perdiendo confianza el cuadro local durante los primeros compases. Supo rehacerse, pero nunca estuvo cómodo sobre el parqué. Pese a irse al descanso por delante y que sobrevivió en un tercer cuarto de parciales que iban y venían, no tuvo capacidad para cerrar el partido cuando debía. Porque con 71-63 a cuatro minutos del final se atascó.
No es nuevo, por ejemplo sucedió en el mismo escenario ante Prat. El bloque alavés le dio la vuelta con un parcial de 0-10 mientras que el Clavijo se encontraba sin su líder, sin un Yates que se enzarzó con Pecachec y que se fue antes de lo previsto por faltas personales. El pívot es básico para los logroñeses. Más allá de sus números, brutales este viernes -36 de valoración, 16 puntos, 17 rebotes, 6 asistencias y 9 faltas recibidas-, su presencia guía a sus compañeros; tienen a quién darle la bola en los momentos calientes. Y eso hace mucho. Tanto como el estar los últimos cuatro minutos del partido sin anotar salvo dos tiros libres a 18 segundos de la conclusión. Imperdonable.
Por lo tanto, el doloroso triple sobre la bocina de Wintering fue la puntilla porque el Clavijo, instantes antes, ya había dado señales de que no sabía cómo ganar a un Araberri que iba y venía, que cimentó su triunfo en el martilleo de Edwards y Araujo (39 puntos entre ambos), en el excesivo bote de Wintering y las dosis de Dee. Suficiente ante un equipo riojano irregular y sin la energía defensiva de las últimas citas. Una pena que se pierda justo cuando quedan dos duelos para conocer el desenlace a la temporada.
POR DELANTE, PERO IRREGULAR
Arrancó el partido como frío. Con malos lanzamientos, fue la tónica del primer cuarto, y ataques algo atascados. Costó coger el aire al choque. Al menos, Araberri tenía claro que donde tenía que meter presión era en el rebote ofensivo. Eso hizo para evitar que el Clavijo pudiera correr. De hecho, sólo pudo hacerlo mediante robos que propiciaron transiciones rápidas. Yates, Adala Moto y luego Bieshaar no podían con Edwards ni con Araujo, que mostró más mordiente que su compañero Pechacek, cargado muy pronto con dos faltas personales.
Precisamente, el de la Guyana y el dominicano se hacían fuertes para anotar con comodidad debajo del aro. No en vano era el único medio para meter canasta. Que se lo digan al Clavijo. Dos mates y seis bandejas hasta que Yates sorprendía con un triple que daba aire a los riojanos, 19-16, después de un partido equilibrado que cerró los primeros diez minutos con ajustado 21-20.
Antonio Pérez quería incomodar a su exequipo. El Clavijo sufría en el balance defensivo y Araberri tomaba el mando en el comienzo del segundo cuarto justo cuando Dee daba otras opciones a los suyos desde fuera. Wintering seguía acumulando muchos segundos de bote atrayendo a los defensores en busca del mejor destinatario, mientras que los de Jenaro Díaz no encontraba el modo de dar continuidad a sus ataques: había poca fluidez, a la vez que malos tiros. Tras un parcial de 0-7, Araberri se escapa 26-31 a cuatro minutos del descanso.
Reaccionó el cuadro local con una acción de dos más uno de Quintela, una penetración de Yates y un triple de Cabot que permitía al Clavijo irse a los vestuarios con un marcador favorable e inimaginable a tenor de los visto en el Palacio, 38-37.
El tercer cuarto vivió de las dinámicas de unos y de otros. Parciales que iban y venían que propiciaron casi más desgaste que otra cosa. Tras el 43-38 reaccionó Araberri con un 3-10 liderado por Dee. Y después del 46-48, hubo un 7-0 tras un triple de Bieshaar para un 53-48 del que se rehízo el conjunto vitoriano para dejar todo en el aire, con un canastón de Wintering -anticipo de lo que sería capaz diez minutos más tarde-, gracias al 58-56.
Se disparaba el conjunto anfitrión con dos triples de Martínez y Bieshaar, 64-56. Además, aumentaba su intensidad defensiva para impedir que Araberri pudiera anotar con fiabilidad, salvo Araujo tras asistencia de Wintering. De ahí que el 71-63 a falta de cuatro minutos obligara a los de Antonio Pérez a un esfuerzo extra. El Clavijo se quedó ciego y aunque a los vitorianos les costaba sumar, recortaban lentamente: 71-69 con un minuto y 10 segundos por jugar. Previamente, Pecachek y Yates le habían puesto picante al partido con un choque de caras. Quizá ese hecho propició que el pívot no estuviera fino en la recta final. De hehco, Yates fallaba dos tiros libres. En la siguiente acción, el pívot de los riojanos era eliminado por personales a la vez que Wintering empataba a 71 con 44 segundos por delante.
Cabot fallaba un lanzamiento más o menos cómodo, mientras que Pecachek dejaba a los suyos por encima, 71-73, a falta de 20 segundos. Antonio Pérez lo vio claro. Hay que hacer falta personal. El checo veía la quinta, daba igual. Bieshaar empataba desde la personal dejando 18 segundos a un ataque de Araberri. Tiempo muerto y a esperar qué decisión tomaba Jenaro Díaz. Defender. Se hizo sin meter manos problemáticas y con cuidado. El tiempo pasaba y los vitorianos le metieron una marcha más. Circularon de un lado a otro y Edwards parecía levantarse para un tiro, pero rectificó y vio a su compañero Wintering. El base ejecutó al Clavijo con un triple mientras la bocina sonaba. Toca levantarse y afrontar el partido del viernes próximo, como lo que es, una final decisiva, ya que la derrota podría llevar a LEB Plata a los riojanos.
FICHA TÉCNICA
Clavijo: Quintela (8), Coggins (9), Cabot (10), Adala Moto (5) y Yates (16), cinco inicial, Bieshaar (10), Phillip (6) y Martínez (8).
Sáenz Horeca Araberri: Wintering (15), Dee (11), Pechacek (3), Edwards (21) y Ucles (6), cinco inicial, Araujo (18), Cizmic (2), Newby y Buesa.
Parciales: 21-20, 17-17 (38-37 al descanso), 20-19 (58-56) y 15-20 (73-76 al final).
Árbitros: Francisco José Zafra Guerra y Enrique Miguel López Herrada. Eliminado por faltas personales el local Yates (min. 39) y a los visitantes Araujo (min. 39) y Pecachek (min. 39).
Incidencias: Medio millar de espectadores en el Palacio de los Deportes.
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