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¿Acusado de un delito grave? Confía tu defensa a SIMÓ Abogados Penalistas

SIMÓ Abogados Penalistas

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Enfrentarse a una acusación penal nunca es un asunto menor. En un contexto legal donde cada minuto cuenta y la presión judicial puede ser devastadora, encontrar un abogado penalista en Madrid con experiencia real, capacidad y un enfoque humano puede ser la clave entre condena y libertad.

En ese escenario, SIMÓ Abogados Penalistas, con sede en Madrid, aporta experiencia, humanidad y especialización exclusiva en Derecho Penal, ofreciendo sus servicios en toda España.

Tráfico de drogas: la frontera invisible entre el error y la cárcel

Ser acusado de tráfico de drogas implica un proceso complejo. En ese vértigo, es importante contar con alguien que escuche sin juicio y actúe con precisión.

En SIMÓ, como abogados penalistas especializados en tráfico de drogas, saben cómo tratar cada caso. Sin fórmulas enlatadas, con estrategia y empatía: impugnando escuchas, cuestionando incautaciones mal hechas o desarmando pruebas viciadas. A veces, encontrar un atenuante como la drogodependencia puede marcar la diferencia entre una condena severa o la reinserción.

Su enfoque es directo y transparente. No hacen promesas irreales, pero explican cada paso del proceso legal de manera comprensible, evitando tecnicismos innecesarios o expresiones legales complicadas.

Extradición: cuando la ley cruza la vida de las personas

Una solicitud de extradición es un procedimiento legal complejo que combina aspectos judiciales y humanos. De pronto, el acusado se ve envuelto en una batalla que mezcla política internacional, tratados antiguos y miedos muy actuales.

Eduardo Simó, abogado experto en extradición, ha enfrentado solicitudes desde Marruecos, Rusia, Venezuela o Argelia, entre otros, y en muchos casos, ha logrado que la entrega no ocurra. ¿Cómo? Demostrando falta de garantías judiciales, fallos formales o incluso invocando la doble incriminación. Porque en este terreno, lo jurídico y lo humano no se excluyen: se abrazan.

Esa es la clave. Este despacho combina la atención a los plazos procesales con la consideración de la situación personal del acusado, reconociendo que detrás de cada caso hay personas con familia, historia y preocupaciones.

Homicidios: no se trata de buenos o malos, sino de Derecho

En ocasiones, un despacho penalista no solo defiende a un acusado, sino que representa a quienes ya no pueden defenderse por sí mismos. En estos escenarios, SIMÓ Abogados se centra en ejercer la acusación particular con rigor y profesionalidad, priorizando la justicia efectiva sobre el espectáculo mediático.

Aunque algunos casos atraen la atención de numerosos medios de comunicación, el despacho mantiene el foco en la verdad procesal y en que la justicia se administre en los tribunales, no en los platós de televisión. “Nuestro trabajo no es decidir quién es bueno o malo. Es aplicar el Derecho. Y eso incluye estar del lado de las víctimas”, asegura Eduardo Simó. 

Con una trayectoria en delitos contra la vida y la integridad física, tanto como defensa y como acusación, el despacho conoce ambos flancos de la batalla. Eso les permite anticipar movimientos, leer las grietas del procedimiento y construir estrategias completas. Porque la experiencia no solo se mide en casos ganados, sino en vidas defendidas y en la capacidad para ser efectivo.

Delitos sexuales: sensibilidad, cercanía y defensa técnica

Pocas cosas marcan tanto como ser acusado o víctima de un delito sexual. Para el acusado, sea culpable o inocente, el estigma se instala como una mancha que no se borra ni con absolución. Para una víctima, las marcas son mucho más profundas. Por eso, SIMÓ aborda estos casos con dos armas contradictorias pero complementarias: empatía y rigor.

Escuchan. Evalúan. Examinan la cadena de custodia, la coherencia de los testimonios, la forma en que se obtuvieron las pruebas. No para relativizar, ni para negar la gravedad, sino para garantizar que quien enfrenta el juicio tenga, al menos, un juicio justo.

Son muchos los casos de éxito, y la complejidad y particularidad de cada caso permite contar con una garantía adicional única.

Delitos económicos: cifras millonarias, pruebas invisibles

En este terreno, SIMÓ Abogados Penalistas trabaja con una idea muy clara: detrás de cada número, hay personas. Y detrás de cada acusación, una arquitectura compleja de pruebas, contextos y contradicciones que hay que leer como un mapa, no como una tabla contable.

Cuando actúan como defensa, la prioridad es clara: desactivar el relato incriminatorio desde el minuto uno. No se trata solo de demostrar que “no hubo delito”, sino de detectar dónde flaquea la lógica de la acusación. ¿Hay pruebas o solo conjeturas? ¿Se ha cumplido la cadena de custodia? ¿Las operaciones financieras están realmente vinculadas al acusado, o hay una suposición que nadie ha cuestionado? En muchos casos, la diferencia entre la absolución y la condena está en un matiz: una fecha mal interpretada, un documento dudoso, una transferencia fuera de contexto.

Por otro lado, cuando el despacho asume el rol de acusación particular, el enfoque cambia sin perder rigor. Se trata de construir un relato sólido y verificable, apoyado en documentos, comunicaciones electrónicas, rastros bancarios, y en contradicciones del propio acusado. 

En ambos casos, la clave está en algo que parece obvio pero rara vez se cumple: conocer el caso mejor que nadie, no dejar preguntas sin respuesta y no dejarse deslumbrar por cifras millonarias. Porque, al final, lo que está en juego no es una suma, sino una vida entera.

Mucho más que defensa legal: proteger también en el juicio mediático

Cuando un caso penal salta a los medios, la justicia entra en territorio incierto. En estas ocasiones, la estrategia legal debe considerar tanto el procedimiento judicial como la correcta gestión de la información pública.

SIMÓ Abogados Penalistas ha estado —y está— en el epicentro de ese ruido: homicidios que copan informativos nacionales, defensa en delitos por narcotráfico, delitos sexuales, extradiciones que polarizan, delitos económicos... Su presencia en medios nacionales no es casual: asumen casos penales complejos.

Es una realidad que, en ciertos casos, la defensa no termina en el juzgado. También hay que “arrimar el hombro” cuando el cliente es convertido en personaje, cuando su nombre circula antes de tener una sentencia, cuando la presión pública amenaza con contaminar el proceso. En ese contexto, el despacho acompaña, orienta y si es necesario actúa en el terreno mediático con la misma templanza y seriedad con la que lo hace en sala.

Esa exposición pública refuerza una habilidad crucial como es proteger los intereses del patrocinado en todos los frentes, desde el legal hasta el reputacional. Porque en SIMÓ Abogados Penalistas entienden algo esencial: defender es, ante todo, cuidar. Y ese cuidado empieza por mirar al cliente no como a un expediente, sino como a una persona en un momento límite.

SIMÓ Abogados Penalistas cuenta con tres sedes a disposición de sus clientes: la principal en el Barrio de Salamanca en Madrid, otra en Murcia y una tercera en Águilas. Desde cualquiera de ellas, el despacho ofrece un mismo compromiso en toda España: defensa penal especializada y un trato cercano en los momentos más difíciles.

SEDE CENTRAL MADRID

  • C. de María De Molina, 64, 1º A
  • 28006 Madrid, España
  • Tfnos: 660 86 00 67 - 913 267 462

SEDE LEVANTE MURCIA

  • Avenida del Rocío, 16, 6º D
  • 30007 Murcia, España
  • Tfnos: 660 86 00 67 - 968 557 999

SEDE ÁGUILAS

  • C/ Castelar, 2, entresuelo
  • 30880 Águilas, España
  • Tfno: 968 557 999
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