Mercadillo solidario en el Mercado de San Antón a favor de los proyectos del Padre Ángel

El Mercado de San Antón promueve una vez más una iniciativa solidaria. Lo hace con un mercadillo de objetos de segunda mano que no solo recupera el espíritu del trueque, sino que ayudará a recaudar alimentos frescos para donarlos a los restaurantes Robin Hood, una iniciativa del Padre Ángel que cada día da de cenar gratuitamente a personas sin recursos.

Los jueves, viernes y sábados del mes de mayo y los días 1 y 2 de junio están recogiendo esa ropa que ya no nos ponemos, los libros que ya nos hemos leído o cualquier tipo de objeto (no demasiado grande) que esté rondando por casa ya no usemos. Ellos se encargarán, no solo de darle una nueva vida, sino que los convertirán en comida para quienes más lo necesitan.

¿Cómo funciona? Es tan sencillo como acercarse hasta el Mercado de San Antón con las cosas que ya no quieres y están en buen estado. Ellos se encargarán de tasarlas y les pondrán una valoración económica para que las personas interesadas en llevárselas a su casa sepan cuál es su precio.

Si después de mirar entre todas las joyas que la gente ha ido entregando solidariamente hay alguna que te conquista el corazón, a la hora de pasar por caja en lugar de pagar en euros deberás presentar el ticket de compra de los productos frescos del mercado que hayas comprado en los puestos de la primera planta previamente en los que esté valorado ese producto, que ellos almacenarán en cámaras frigoríficas para que no se rompa la cadena del frío.

La acción está enmarcada dentro de la campaña internacional “Me gusta mi mercado”, que celebra la importancia de los mercados municipales a nivel internacional con diferentes actividades durante el mes de mayo. Los comerciantes del Mercado de San Antón apuestan además por ampliar el mensaje general reivindicando no solo el papel de los mercados en la economía local, sino también la labor social que estos espacios han jugado históricamente.

Así, todos los alimentos donados por las vecinas y vecinos de Chueca y cualquier visitante ocasional que se recauden, se destinarán a colaborar con la labor social de la Real Iglesia De San Anton que, a través de Mensajeros de la Paz España, se encarga de dar de desayunar, de comer y cenar a las personas necesitadas.