Pedro Zerolo vs. Vázquez de Mella, las consecuencias del cambio de nombre de calles

El 14 de mayo de 2016 se inauguraba oficialmente la Plaza de Pedro Zerolo, en un espacio que hasta ese momento recibía el nombre de Vázquez de Mella. Casi dos meses y medio en los que el cambio de nombre de esta plaza de Chueca aún desconcierta a los turistas y continúa ocasionando molestias a vecinos y comerciantes.

Porque, como bien apunta El Mundo en su edición madrileña, estamos aún Perdidos entre Pedro Zerolo y Vázquez de Mella. Porque, aunque las placas que indican el nombre de la plaza ya muestran el nombre de Pedro Zerolo, algunos carteles como el del aparcamiento que se encuentra bajo la plaza siguen haciendo referencia a Vázquez de Mella.

Aunque en el callejero oficial el cambio de denominación es ya efectivo, aún quedan pendientes por solventar algunos flecos, como la información a residentes y negocios, que no saben si tienen que hacer algún trámite para adaptarse a su nueva dirección. Porque, aunque desde el Ayuntamiento anunciaron que se informaría debidamente a todas las partes afectadas, la realidad es que ninguno ha recibido ninguna notificación y les preocupa que pueda haber algún problema en el futuro.

La mayoría de ellos ha optado por esperar, a pesar de que oficialmente estarían obligados a renovar su Documento Nacional de Identidad notificando su residencia en una vía cuyo nombre ha cambiado, presentando un justificante del Consistorio que especifique que su vía (en este caso plaza) tiene ahora otra denominación, sin que deban abonar nada por el cambio.

Por lo que respecta a las viviendas y negocios, según el reglamento hipotecario no hay que modificar las escrituras de propiedad hasta que no se produzca una compraventa y la correspondencia seguirá llegando igual a sus buzones, pues Correos tiene orden de seguir entregando las cartas y paquetes a ambas direcciones.

Otro tema es la actividad comercial, pues son los empresarios y comerciantes los que se han llevado la peor parte del cambio de denominación al tener que realizar cambios en sus páginas web, redes sociales y material de papelería de sus negocios, asumiendo los costes que ello conlleva de su propio bolsillo.

Existe otro factor negativo, los problemas de geolocalización de sus negocios, pues la Plaza de Pedro Zerolo no está aún contemplada en muchos de los servicios de localización y genera confusión entre los clientes potenciales, que sí que les encuentran sin dificultad al utilizar el nombre de Plaza de Vázquez de Mella.

Estos daños colaterales podrían suceder próximamente en otras 27 calles de la ciudad con la puesta en práctica de la Ley de Memoria Histórica. Del primer listado propuesto por el Comisionado para la Memoria Histórica, cuatro plazas y veintitrés calles cambiarían su denominación para eliminar alusiones franquistas, aunque podrían no ser las únicas.