Mano dura contra las terrazas ilegales del barrio Salamanca; las 200 de Centro aún esperan
La política municipal con respecto a las terrazas que se salta la normativa está empezando a cambiar. Lo ha hecho por el distrito de Salamanca, donde su concejal, Pablo Carmona, ha empezado a llamar la atención a los locales con terrazas ilegales y ha desmantelado una de las más míticas, la del Ramsés, en plena Puerta de Alcalá.
El local se saltaba un día sí y otro también la permisiva ley aprobada durante el mandato de Ana Botella, como ha denunciado Ahora Madrid y ha admitido también el PP: los imcumplimientos iban desde la ocupación de un espacio mayor al autorizado en la vía pública hasta el aparcamiento en el carril bus de la calle Alcalá de los lujosos coches de sus clientes.
El local afectado, por su parte, advierte que la decisión de clausurar la terraza definitivamente dejaría sin empleo a más de 80 personas, pero no indica que su instalación cumpliera la legalidad vigente. Sus trabajadores se manifestaron encadenándose a los árboles situados en su terraza, con un mensaje que podía ser leído de forma contradictoria e incluso negativa si atendiéramos a la normativa: “Justicia para todas las terrazas”.
El levantamiento de terrazas ilegales era práctica habitual durante el mandato de Gallardón: un camión municipal acudía con la policía y recogía las sillas y mesas y las llevaba a un depósito municipal. También era práctica habitual del local infractor no hacer ruido mediático alguno, volver a colocar otras mesas y sillas a las pocas horas del levantamiento y continuar su negocio como si nada hubiera pasado. El importe de la multa (hasta 3.000 euros) lo pagaba con la recaudación de una o dos tardes de su terraza, si era lo suficientemente grande.
La llegada del ejecutivo de Ana Botella cambió la legislación sobre terrazas para facilitar su instalación en las calles. “Para flexibilizar y favorecer las barreras que dificulten el emprendimiento y así favorecer la iniciativa empresarial, lo que repercute en la creación de empleo”, dijo entonces la mandataria. Comenzó entonces una carrera desenfrenada por abrir terrazas en Madrid, donde han inundado las aceras por las que antes transitaban sin dificultad los peatones. Incluso uno de los hijos de Ana Botella abrió una terraza sin licencia hace dos veranos.
Una de cada tres terrazas es ilegal en Centro
Mientras Pablo Carmona actúa en el distrito de Salamanca, su homólogo de Centro, Jorge García Castaño, todavía se lo piensa. El concejal hacía recuento este verano de todos los comercios que han puesto terrazas pirata en la calle: hasta 200, según cálculos municipales publicados por este periódico. Locales que cortan el paso a los peatones sin contar con permiso y sin pagar por el uso del espacio público.
La cifra significa que una de cada tres terrazas del distrito Centro es ilegal. Un dato tan elevado que la junta de distrito admite que no cuenta con medios para erradicar la práctica: García Castaño explicaba en verano que el Consistorio solo puede retirar la terraza, levantar acta e imponer una sanción. Pero explicaba que no se le permitía el precinto del local por incumplir la legislación.
Las plazas de Malasaña están infestadas de terrazas -algunas de ellas pirata-, como demostró este periódico en una publicación en la que inventariamos todas las existentes. La proporción de mesas y sillas de uso privado frente a bancos en las calles es escandalosa (342 mesas de terraza y 1.368 sillas frente a 81 bancos) y eso sin contar las situadas en las calles, donde el incumplimiento de la normativa es aún mayor.
Para solucionar esta situación, el nuevo Ayuntamiento aboga por un cambio de la normativa, “como figura en el programa electoral”, señalaba entonces.
Apoyo de los vecinos a la actuación municipal
La plataforma de las asociaciones de vecinos del Centro (ACIBU, AVV AUSTRIAS, AVV CAVAS (LA LATINA), AVV CHUECA, AVECLA, AVV BARRIO LETRAS, AVV LA CORRALA y AVV JUSTICIA) ven en esta medida del Ayuntamiento el indicio para el restablecimiento del orden legal «contra la vergonzosa usurpación del espacio público a los ciudadanos por parte de no pocos hosteleros de esta ciudad».
En un comunicado, dan las gracias al equipo de Carmena por cumplir con sus obligaciones. «[...] nos felicitamos, y felicitamos al ayuntamiento por su decidida actuación, animándole en que continúe firme y recto por la línea de la legalidad y de la protección de los intereses del conjunto de los ciudadanos. A pesar de los malabares dialécticos de algunos políticos capaces de hasta justificar la ilegalidad y generar sombras sobre las autoridades incluso cuando aplican las muy livianas normas inventadas por su propio grupo», denuncian.
«Animamos, y así lo hemos solicitado ya, a que el Ayuntamiento termine de una vez con el vergonzoso espectáculo del terrazón, que invade de manera descontrolada y especulativa nuestro espacio público, aplicando una moratoria a más ocupaciones y a una URGENTE revisión de la actual normativa que ampara que los vecinos de la ciudad no puedan andar ni disfrutar de sus calles y plazas con total normalidad. Terrazas sí pero no así», concluyen.
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