Los cuatro eléctricos más nuevos… y el más veterano: del Kia Niro EV al Renault ZOE

Este año 2018 será recordado como el auténtico banderazo de salida en la carrera por el liderazgo de los eléctricos puros. Cada vez hay más marcas comprometidas con su desarrollo, algunas incluso cuentan con más de un modelo a la venta y las más veteranas van ya por la segunda o tercera generación de sus propuestas. Y algo que resulta aún más importante para el usuario: las baterías han dado un salto cualitativo y la medición de la autonomía ha bajado al mundo real.

El muy favorable y nada realista ciclo NEDC está dando paso al ciclo WLTP. Este nuevo ciclo armonizado permitirá que las publicidades dejen de exhibir autonomías superiores a los 400 kilómetros, imposibles de conseguir ni con todo el cuidado del mundo, para aproximarlas a las de uso real de estos automóviles.

Así las cosas, hoy te puedes comprar sin temor a equivocarte cualquiera de las novedades 100% eléctricas que se han presentado en lo que llevamos de año. O confiarte a la inercia del líder del mercado.

1. Hyundai Kona EV

Con la silueta de todo camino pequeño que tanto gusta, el Kona se coloca por debajo del otro eléctrico de Hyundai, el Ioniq, con una carrocería compacta de 4,19 metros, mucho espacio a lo alto para cuatro ocupantes y un interior diferente y más elaborado que el de sus hermanos de gasolina. Disponible con 136 o 204 caballos de potencia, no solo es el único SUV eléctrico de este tamaño a la venta; también uno de los pocos eléctricos de cualquier tamaño con una enorme batería de 64kWh, capaz de hacerle rondar los 470 kilómetros de autonomía.

Con el descuento actual durante su lanzamiento de 5.200 euros se puede estrenar por 33.300 euros (136 caballos) o 36.300 (204 caballos).

2. Jaguar IPace

El que pega primero, suele pegar dos veces. Y contra todo pronóstico, el primer SUV encuadrado en el segmento de lujo no es ni alemán, ni japonés. El IPace ya está a la venta y propone una carrocería extraordinariamente bien aprovechada, con suelo plano y un maletero enorme (656 litros), envuelta en buen diseño y un acabado a la altura de su precio: 79.000 euros.

Su motor eléctrico de 400 caballos le permiten lograr el 0-100 km/h en 4,8 segundos, y mover un chasis que vira plano y se siente realmente preciso y deportivo, durante 480 kilómetros según el nuevo ciclo de medición WLTP. La batería de 90 kWh se reparte en todo el piso del coche y colabora en la reducción del centro de gravedad al estilo de lo que sucede con su rival más próximo, aunque de concepción muy distinta, el Tesla Model X.

3. KIA Niro EV

Cuando el conglomerado industrial Hyundai-Kia anunció hace un lustro que iba a invertir en I+D más cantidad de dinero que cualquier otra marca del mundo, estaban pensando en productos como el Niro EV. Compartiendo plataforma con su primo de Hyundai, el Ioniq, este Niro es un perfecto punto medio entre la silueta de moda y los asentados atributos de un compacto.

Para empezar, es uno de los SUV más ligeros en su configuración estándar de combustión, lo que le permite a esta versión eléctrica estirar la autonomía hasta los 450 kilómetros entre recargas hablando de la combinación de batería y motor más grande: 64kWh y 204 caballos. Al igual que su primo pequeño el Kona, también se ofrece una batería de 40kWh, que reduce la autonomía a 300 km, siempre en ciclo WLTP. Su precio estará por debajo de la versión de autonomía extendida PHEV, que ronda los 35.00 euros, y empezará a entregarse justo a la vuelta del verano

4. Nissan Leaf

Asimilado con su nueva estética a la de un compacto de cinco puertas muy amplio, el Leaf cumplirá 10 años en 2019. Esto no supone un problema porque el coche está muy bien hecho, con un interior altamente tecnológico, cómodos asientos, un maletero muy respetable (436 litros) y todo el equipamiento de seguridad, pero sí le hace arrastrar una mácula que no va a cambiar a corto plazo: es el único de su categoría cuya batería está refrigerada por aire en lugar de por fluido.

Conviene tenerlo en cuenta si se realizan cargas rápidas muy frecuentes porque es la circunstancia que más le penaliza. Tiene un motor de 150 caballos y una batería de 40kWh que garantiza sin problemas los 300 kilómetros de autonomía. Ahora mismo está por debajo de los 28.000 euros y es el único capaz mediante su tecnología V2G de conectarse a la red eléctrica y devolver su carga cuando no se vaya a utilizar.

5. Renault ZOE

El eléctrico más vendido de España y buena parte de Europa es lo más parecido a un Renault Clio, sin motor de combustión, pero más alto porque esconde sus baterías bajo el piso. En 2017, descontando las 500 unidades que se matricularon para el programa de car sharing, se vendieron 867 unidades. Su precio de 27.000 euros, venía siendo rompedor pero la competencia se ha puesto las pilas (nunca mejor dicho) y es de esperar que Renault apriete aún más sus generosas ofertas de adquisición a plazos, con la batería en alquiler y la instalación del punto de recarga, todo por una cuota mensual muy tentadora.

Por lo demás, no destaca especialmente en nada y precisamente ser igual que un coche de gasolina es lo más tentador para muchos: ir del punto A al punto B, con 300 kilómetros autonomía y batería de 40kWh.

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