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ERC y CUP acercan posiciones con un “plan de choque” para reformar los Mossos

Barcelona —

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Barcelona, 23 feb (EFE).- ERC y la CUP han acercado este martes posiciones en la negociación para la formación de un nuevo gobierno tras las elecciones catalanas del 14F y han coincidido en defender un “plan de choque” para reformar el modelo policial de los Mossos d'Esquadra.

La actuación de los Mossos ante los disturbios callejeros tras el encarcelamiento del rapero Pablo Hasel -con destrozos de mobiliario urbano y saqueos, pero también de episodios dramáticos como el de una joven que perdió un ojo supuestamente por el impacto de un proyectil de foam-, sacudió la semana pasada el inicio de la negociación.

La CUP, cuyos 9 diputados pueden ser claves para completar los 33 de ERC y los 32 de JxCat en la investidura, alertó la semana pasada de que la actuación de Mossos “condiciona” la negociación y pidió la dimisión del conseller de Interior, Miquel Sàmper, de JxCat.

Este martes, además, los Mossos han detenido al concejal de la CUP en Reus (Tarragona) Edgar Fernández para llevarlo ante el juez que lo investiga por los incidentes en las protestas de 2019 contra la sentencia del procés, tras lo que ha quedado en libertad.

En medio de este clima de creciente tensión, representantes de ERC y de la CUP han celebrado su segundo encuentro tras el 14F para tratar de encarrilar las conversaciones de cara a la constitución del Parlament, el 12 de marzo, y la investidura del nuevo president, cargo al que aspira el republicano Pere Aragonès.

Ambos equipos negociadores, según ha informado ERC en un comunicado, han puesto sobre la mesa un “plan de choque que debe permitir hacer un cambio profundo en el modelo de seguridad y orden público de Cataluña”.

También han hablado de medidas que el nuevo gobierno deberá tomar “de manera inminente para paliar los efectos de la crisis” y han perfilado un “compromiso antifascista, que se quiere hacer extensivo al resto de grupos del Parlament”, para afrontar la entrada de Vox en la cámara catalana con 11 diputados.

La CUP, también en un comunicado, ha confirmado su “trabajo conjunto por un plan de choque” que permita dar un “giro de 180 grados” en la “estrategia antirrepresiva” de Cataluña y ha defendido un “pacto nacional antifascista que englobe al conjunto de organizaciones feministas, antifascistas y antirracistas”.

Este anunciado “plan de choque” para revisar el modelo policial ha llegado después de que la consellera de la Presidencia, Meritxell Budó, haya pedido separar las negociaciones sobre la investidura del nuevo president del debate sobre los Mossos.

Según Budó, el debate sobre la posible revisión del modelo policial “debe poder abordarse de manera serena”, con las aportaciones de “especialistas” en el Parlament en esta legislatura, “apartado del foco mediático y del ruido de estos días”.

Mientras ERC busca asegurarse los apoyos para la investidura de Pere Aragonès -le bastarían los votos de JxCat y la CUP-, el socialista Salvador Illa aún no renuncia a ella: “Me siento legitimado y con la obligación moral de presentarme”, ha dicho.

Illa ha explicado desde La Sexta que el PSC propondrá que sea “una mujer de izquierdas” quien presida el Parlament.

También la CUP se plantea la posibilidad de asumir la presidencia del Parlament, a fin de “hacer frente a los ataques del Tribunal Constitucional a la soberanía” de la cámara.

Además de su reunión con ERC, los negociadores de la CUP han mantenido este martes otro encuentro, con En Comú Podem, para explorar posibles acuerdos.

Los comunes han valorado “positivamente” esta primera toma de contacto, en la que han coincidido en destacar la necesidad de resolver la emergencia habitacional, la transición ecológica, poner freno a proyectos como BCN World o avanzar en un nuevo modelo policial que termine con las pelotas de foam, entre otros asuntos.

Por su parte, el diputado electo de Vox en el Parlament Ignacio Garriga ha pedido la dimisión del conseller Miquel Sàmper por haber permitido “de manera constante” la “oleada de violencia que ha arrasado las calles de Cataluña” en las protestas a favor de Hasel.

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