Esperanza Aguirre da un paso atrás para tomar impulso
La presidenta del PP madrileño ha vuelto a hacerlo. Anuncia que se va, que convocará un Congreso Extraordinario y que no será candidata para revalidar el cargo. Dicho así, la conclusión más lógica llevaría a pensar que Aguirre está anunciando su marcha de la política. Pero tratándose de ella resulta aventurado establecer conclusiones. Parece más probable que se esté retirando unos pasos pero para tomar impulso y complicarle la vida a Rajoy.
En su discurso ante el Comité Ejecutivo del PP de Madrid ha marcado las reglas para su relevo. Aguirre quiere un modelo en donde cada militante tenga derecho a votar a sus nuevos dirigentes. De un plumazo, la lideresa ha anunciado su salida y le ha metido al presidente de su partido el caballo de troya de las primarias.
Aguirre da este paso atrás acosada por sus resultados del 24M y por los rumores constantes de que la dirección del PP planeaba una gestora para sustituirla en el poder de Madrid. Dicho de otro modo, Aguirre no tenía mejor opción que enrocarse.
Rajoy, mientras tanto, anunciará este jueves sus planes de cambio para el PP. Su eterna enemiga en el partido se le ha adelantado en la estrategia y ha limitado su margen de maniobra. El presidente del PP ya advirtió que no quería ahora una catarata de congresos regionales y pidió que nadie los convocase hasta después del verano. Aguirre quiere celebrar el suyo “lo antes posible” obligando a Rajoy a tomar una decisión: seguir su ritmo o atreverse a disolver el partido en Madrid y nombrar una gestora.
Aguirre ya ha anunciado que cumplirá con su labor en la oposición al Gobierno de Manuel Carmena en el Ayuntamiento de Madrid. Lo dicho, Esperanza Aguirre dice adiós, pero no se va.